La exposición al gas radón en los hogares representaría la segunda causa de cáncer de pulmón, tras el tabaquismo, según un estudio realizado en Rumania y en la zona granítica de Torrelodones (Madrid) por la Universidad de Cantabria y la Universidad Babes-Bolyai (Rumania).
Factor de riesgo inesperadamente alto
Un estudio publicado en la revista Science of the Total Environment, realizado en Torrelodones (Madrid) y Stei (Rumania), evidencia que el radón, un gas natural radiactivo que en determinadas regiones se introduce en los hogares, es el segundo factor de riesgo después del tabaco para padecer cáncer de pulmón.
El estudio presenta un análisis comparativo de la exposición al radón en dos zonas propensas a la existencia de este gas, Stei ( Rumania) cerca de antiguas minas de uranio y en la zona granítica de Torrelodones, Sierra de Guadarrama.
Los autores han estimado la mortalidad por cáncer de pulmón atribuible al radón y al tabaco en las zonas estudiadas entre 1994 y 2006, siendo el valor resultante respecto al riesgo por exposición al radón el doble del esperado.
“El estudio verifica que el radón es la segunda causa de cáncer de pulmón, tras el consumo de tabaco, al igual que reflejan muchos otros trabajos realizados desde hace años en diversas partes del mundo”, afirmó Carlos Sainz, coautor del informe e investigador del Grupo de Radiaciones ionizantes de la Universidad de Cantabria.
El radón es un gas incoloro, inodoro e insípido que se origina por la desintegración del uranio-238, elemento radiactivo natural presente en todas las rocas y suelos en cantidades variables. “Es más abundante en zonas graníticas, como Torrelodones y otras áreas del oeste de la Península, como zonas de Galicia, Salamanca o Cáceres”, puntualizó Sainz.
Control de niveles y ventilación
El gas radón procede del subsuelo y se infiltra en las casas en mayor o menor medida según la permeabilidad del terreno, por los poros y grietas de garajes y sótanos. Este elemento radiactivo se acumula más en las residencias unifamiliares y en los bajos, que en las viviendas situadas en la parte alta de los bloques de pisos.
Para solucionar el problema los expertos proponen, además de controlar de forma periódica los niveles del gas, ventilar los sótanos y bodegas con extractores . También se recomienda la construcción de barreras arquitectónicas impermeables al radón, sobre todo en casas de nueva construcción.
La OMS reduce los límites recomendables de radón
La Organización Mundial de la Salud (OMS) presentó el pasado septiembre la guia Handbook on indoor radon, a public health perspective , en la que redujo los limites recomendables de radón por metro cúbico en el interior de los hogares de 1000 becquerelios/m3 a 100 becquerelios/m3. El estudio en Torrelodones refleja que más de la mitad de las viviendas superan esa cantidad.
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Fuente: SINC
Imagen Cabecera: W. Commons
