Las moscas y otros insectos voladores pueden transportar y propagar bacterias por nuestros alimentos así como contaminar los aparatos técnicos que usamos en nuestra vida personal y profesional. Dadas las restricciones en los productos químicos para luchar contra estas plagas, un equipo de investigadores del Agricultural Research Service (Estados Unidos) se pusieron a investigar para encontrar nuevas armas de lucha.
En ese contexto nace Flybrella, un artefacto parecido a un paraguas invertido que se usa colgado y en los ensayos ha resultado ser prácticamente implacable: 98% de insectos voladores capturados. En su interior, Flybrella contiene un cebo para atraer a las moscas a su parte alta. Una vez allí, respiran durante unos 15 segundos una sustancia tóxica emanada del propio aparato y caen flminadas hacia el interior. En resumen: simple y efectivo.