El Gobierno de Aragón ha editado una guía informativa sobre el Síndrome del Edificio Enfermo, una patología que la OMS describe como un conjunto de dolencias asociadas a la contaminación del aire en interiores que afecta, al menos, a un 20% de sus ocupantes.

La Guía, que se ha editado en colaboración con la Fundación Ecología y Desarrollo, expone los principales factores que intervienen en el origen del Síndrome del Edificio Enfermo en los edifícios de oficinas, los síntomas que se generan y propuestas para solucionarlos.

El documento se ha distribuido en oficinas de las administraciones y entre grandes empresas. Además está disponible para todo el público en la web de Salud Pública del Gobierno de Aragón www.saludpublicaaragon.es.

Entre los síntomas característicos de esta afección se encuentran, entre otros, la fatiga y/o decaimiento, el picor e irritación de piel, ojos, nariz o garganta, los síntomas alérgicos como el lagrimeo o la secreción nasal, dificultades respiratorias, dolores de cabeza, náuseas, dificultad de concentración, dermatitis o insomnio.

Consultar la Guía "¿Mi oficina está enferma?" (PDF)

La Guía destaca como principales factores origen del síndrome:

• Contaminación ambiental: concentraciones elevadas de CO2, ácaros, partículas, polvo en suspensión, COVs, etc. pueden producir irritaciones, dolores de cabeza, náuseas, etc.
  Para ello se recomienda evitar las concentraciones de personal, una buena ventilación y el uso de materiales de construcción y muebles ecológicos, que no desprendan formaldehidos.

• Olores: gases y vapores.
  Se recomienda una buena ventilación y cumplir con las medidas higiénicas adecuadas.
• Campos electromagnéticos: Los aparatos y los sistemas eléctricos producen campos electromagnéticos, que pueden resulatar nocivos para la salud.
  Se recomienda aplicar una distancia mínima entre el trabajador y la fuente productora, ya que la intensidad de los campos electromagnéticos disminuye con la distancia.
• Iluminación deficiente: Una baja iluminación, un contraste insuficiente, brillos excesivos y destellos, pueden causar stress visual, irritación de ojos y dolores de cabeza.
  Se recomienda contar con iluminación natural y con la iluminación general necesaria para las tareas que se realicen. La pantalla del ordenador debe estar alejada de las ventanas, perpendicular a la fuente de luz y los fluorescentes deben de estar cubiertos con difusores o rejillas para evitar los reflejos.
• Ruido: El nivel del ruido debe de mantenerse en los límites de 60-70 dB(A).
• Sistemas de Calefacción y Aire Acondicionado: Los conductos de transporte del aire son capaces de trasladar microorganismos y liberar gases tóxicos.
  Se recomienda un adecuado mantenimiento del sistema de climatización para asegurar que los filtros estén limpios y evitar la acumulación de suciedad en los dispositivos.
  El Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios (RITE)* establece límites de temperatura, para el invierno no debe superar los 21ºC e inferior a 26ºC para el verano.
• Humedad relativa: Una baja humedad relativa de entre el 20-30%, produce irritaciones oculares, eritemas cutáneos, sequedad de las mucosas, etc..., favoreciendo las infecciones respiratorias. La humedad relativamente alta, en torno al 70%, puede favorecer la proliferación de microorganismos.
  Se aconseja mantener la humedad relativa entre el 30% y el 70%.
• Ventilación: la ventilación insuficiente es una de las causas más frecuentes del Síndrome del Edificio Enfermo. En una oficina se recomienda un aporte de aire mínimo de 10 l/seg (aprox. 35 m3/h) por persona.
  Se recomienda asegurar la renovación del aire y ventilar.

Fuente: Departamento de Salud y Consumo del Gobierno de Aragón