Según publicó ayer El Periodico, la refrigeración ocasiona cada verano 2 millones de resfriados. En verano el 50% de las bajas por enfermedad en los oficinistas están relacionadas con el aire acondicionado según la Asociación Nacional de Entidades Preventivas Acreditadas.
Estos aparatos favorecen la aparición de catarros, contracturas, tos, dolores musculares, faringitis, rinitis, asma, neumonía, alergias y dolores de cabeza, con una recuperación que puede implicar entre tres y siete días de tratamiento. La productividad de los empleados puede bajar el 15% si no hay una gestión ambiental adecuada, según afirma la consultoría de Aire Limpio. Una investigación de la Universidad de Cornell (EEUU) revela que, cuando en la oficina la temperatura desciende de 25 a 20 grados, los fallos al escribir en los teclados aumentan el 50% y la productividad se resiste.
En un intento de conjugar salud, bienestar y ahorro energético, la Conselleria d'Economia de la Generalitat de Catalunya ha impulsado una campaña en la que promueve que los termostatos de las oficinas, públicas y privadas, no bajen este verano de los 25 grados. Los pequeños contribuyentes que secunden la campaña, que tiene como lema Este verano no pases frío, también notarán los efectos en la factura de la luz.
La normativa admite una temperatura de entre 17 y 27 grados. Sanidad (Catalunya) pide que no baje de los 21 grados. Los médicos recomiendan que esté por encima de 22 o 23 grados. Los sindicatos y la Administración central optan por los 24 grados. Y la Generalitat de Catalunya apuesta por los 25 grados para ahorrar energía.
A su vez, es importante que los aparatos cumplan la normativa de higiene laboral de forma estricta, ya que pueden ser un caldo de cultivo para virus y bacterias, según afirma Héctor Verea, jefe de neumología del Hospital Juan Canalejo de A Coruña. La humedad debe situarse entre 30% y el 44% según Antonio Iniesta, médico de una empresa con un millar de empleados y miembro de la Asociación Española de Especialistas en Medicina del Trabajo. En la mayoría de edificios no se ha tenido en cuenta, dice.
Foto: Martín Diego(Aire Acondicinado)
Fuente: El Periodico