Según un estudio realizado en la Universidad del Pais Vasco (UPV/EHU) los biocidas microencapsulados resultan menos tóxicos para el medio ambiente. La autora de la tesis "Microencapsulación de biocidas" ha desarrollado un microencapsulado compatible con el medio ambiente, más soluble en agua, más manejable, con mejores condiciones de conservación y eficaz contra los insectos voladores.
El objetivo de la doctora en Ciencias Químicas Mariluz Alonso, autora de la tesis, ha sido obtener una formulación biocida que aune eficacia y un bajo impacto ambiental. El producto desarrollado supera determinadas limitaciones de los biocidas comunes, derivadas de su perfil toxicológico, su mala solubilidad en agua, una alta viscosidad que complica su manipulación y su alta sensibilidad a la luz y a la temperatura. El nuevo biocida microencapsulado no sólo cumple estas expectativas sino que ha demostrado ser eficaz contra la mosca doméstica en los ensayos realizados en el laboratorio.
Combinación de insecticidas
El producto ha sido elaborado con una combinación de insecticidas carbamatos (bendiocarb), nicotinoides y piretroides para aprovechar las ventajas que ofrece cada uno.
Los carbamatos son menos dañinos para el medio ambiente que otros, más biodegradables y menos tóxicos para el ser humano. Su gran desventaja es que los insectos pueden llegar a hacerse resistentes a ellos.
Los insecticidas nicotinoides y piretroides, en cambio, no presentan ningún inconveniente en cuanto a la resistencia. Los nicotinoides se aplican particularmente a la horticultura, porque son más seguros para las abejas. Los piretroides, por su parte, son los más utilizados, y se caracterizan por su baja toxicidad para mamíferos, aunque sí resultan tóxicos para abejas y organismos acuáticos.
Microencapsulación del biocida en la cavidad de las moléculas de carbohidratos de tipo ciclodextrina, Imagen: UPV/EHU |
Además, la investigadora ha intensificado la actividad de los piretroides incluyendo el butóxido de piperonilo (Bp) en el microencapsulado. Se trata de una sustancia que aumenta la eficacia de este insecticida de 10 a 150 veces.
Para completar el estudio, se ha conseguido también la encapsulación del fungicida tebuconazol.
Ciclodextrina como agente encapsulante
Alonso se ha decantado por los carbohidratos de tipo ciclodextrina (CD) como agente encapsulante.
Los carbohidratos poseen una alta solubilidad acuosa, poca tendencia a absorber la humedad, una vida media alta a temperatura ambiente y un bajo coste. Las ciclodextrinas, en concreto, son dextrinas cíclicas obtenidas a partir de una hidrólisis parcial del almidón de maíz.
Asimismo, se ha obtenido un rendimiento superior al 99 % en la formación de las microcápsulas, al aplicar un método de disolución con disolventes orgánicos optimizado en el laboratorio donde se ha llevado a cabo la investigación.
Ventajas de la formulación
Gracias al tamaño micrométrico de los encapsulados obtenidos, el producto tiene la ventaja de poder tratar una superficie mayor y de ser menos detectable para los insectos. Además, gracias a la ciclodextrina que protege el biocida, se neutraliza su perfil toxicológico y disminuye su degradación por almacenamiento.
Asimismo, al mejorar la solubilidad del compuesto (y por tanto poder preparar el producto comercial en base agua) evita el uso de disolventes derivados del petróleo, permitiendo la fabricación de productos más respetuosos con el medio ambiente. Finalmente, la dificultad que supone manipular los biocidas líquidos a temperatura ambiente se solventa con la propia formación de estos microencapsulados.
Alonso ha podido demostrar, en el laboratorio, la eficacia insecticida del producto contra la mosca doméstica. Este resultado sirve de base para obtener formulaciones eficaces aplicables a diferentes tipos de insectos en general y a moscas domésticas en particular, tanto en interiores como en exteriores.
Fuente: UPV/EHV