La exposición al tiamethoxam, insecticida sistémico neonicotinoide utilizado habitualmente para proteger los cultivos, podria ser una de las causas del despoblamiento de las colmenas, no por su toxicidad directa sino por su efecto desorientador. Dos estudios de campo publicados en la revista Science muestran los efectos negativos de este tipo de pesticidas sobre las abejas de la miel y los abejorros.
El despoblamiento de las colmenas y la desapacición de las abejas melíferas es un fenómeno preocupante, que vuelve a ser actualidad ante la evidencia de que los insecticidas sistémicos (son absorvidos por la planta ), utilizados habitualmente para proteger los cultivos, son indirectamente perjudiciales para estos importantes polinizadores, interfiriendo en la habilidad de los miembros cazadores-recolectores para hallar su camino de regreso a la colmena.
Los hallazgos son, según los investigadores, motivo de preocupación y ponen de manifiesto la necesidad de mejorar la regulación y las pruebas realizadas en los pesticidas.
Mortalidad por desorientación
Uno de los estudios, realizado por un equipo de investigadores e ingenieros franceses, muestra que la exposición no letal de las abejas melíferas al thiamethoxam causa, no obstante, una alta mortalidad por incapacidad de regresar a la colmena, a niveles que pueden poner en peligro la supervivencia de ésta.
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El thiamethoxam es un insecticida sistémico, que penetra en los tejidos conductores de la planta y se reparte por ella (de modo que todo insecto masticador o chupador que se alimente de ella se verá afectado), de la familia de los neonicotinoides, insecticidas que actúan sobre el sistema nervioso central de los insectos.
Los investigadores realizaron pruebas implantando microchips en el tórax de los insectos y comprobaron que la ingesta de thiamethoxam, incluso en dosis muy inferiores a las que serían letales para estos animales, se traducía en una "disminución significativa" de la tasa de regreso a la colmena.
Este efecto, sumado a la mortalidad natural de los insectos, hace crecer el porcentaje de decesos diarios entre un 25 % y un 50 % , lo que supone tres veces la tasa normal, que ronda el 15 % , de acuerdo con el estudio.
Al trasladar sus resultados mediante un modelo matemático a la demografía real de las abejas, determinaron que la población podría reducirse a la mitad en periodo de polinización, llegando incluso al 75 % , si la mayoría de los miembros de una colonia se viesen afectados por el producto.
Esta disminución de ejemplares en un momento en el que la población de la colonia alcanza niveles máximos de actividad sería "crítica", según los científicos, y a la larga "podría afectar a la supervivencia de la colonia".
Reducción del crecimiento y de la producción de reinas
El segundo estudio publicado en Science muestra como una pequeña dosis de imidacloprid, otro insecticida neonicotinoide, afecta a las colonias de abejorros (Bombus terrestris), reduciendo su tasa de crecimiento y sufriendo hasta un 85% de disminución en la producción de nuevas abejas reinas.
Los insecticidas neonicotinoides estan presentes a nivel de trazas en el polen y el néctar de las plantas.
Dada la escala de uso de los neonicotinoides, los investigadores sugieren que pueden estar teniendo un impacto negativo considerable sobre las poblaciones silvestres de abejorros en todo el mundo desarrollado.
La creciente evidencia de la disminución en las poblaciones de abejas y abejorros sigue causando gran preocupación debido a los valiosos servicios ecosistémicos que proveen.
Fuente: AGROINFORMACIÓN
A Common Pesticide Decreases Foraging Success and Survival in Honey Bee, Science DOI: 10.1126/science.1215039
Neonicotinoid Pesticide Reduces Bumble Bee Colony Growth and Queen Production, Science DOI: 10.1126/science.1215025