A pesar de que en ocasiones nos contrarie, la Naturaleza, sin duda, es sabia.  Cucarachas que modifican su sentido del gusto y desarrollan aversión a los cebos, chinches que engrosan su cutícula para evitar la penetración de los insecticidas en su cuerpo o insectos capaces de descomponer los compuestos pesticidas antes de que los maten. Lo que los humanos llamamos resistencia, para la Naturaleza es evolución y supervivencia.

Si hay lugares donde plagas como cucarachas, ratas o moscas están realmente de más, uno de ellos es el entorno de la industria alimentaria. Por suerte, ciertas estrategias de mantenimiento y saneamiento proactivo pueden ayudar a evitarnos problemas de salud pública, perdida de reputación o retirada de productos, al mismo tiempo que facilitaran cumplir con los requisitos de las auditorías. 

Los ciudadanos urbanitas tendemos a focalizar más nuestra aversión en las ratas de alcantarilla, que a veces podemos avistar en el exterior, que en los minúsculos ratones domésticos (Mus musculus). Sin embargo, es más probable que sea un simpático ratón instalado discretamente en nuestro domicilio, y no una rata, quien nos pueda transmitir toda una serie de bacterias, algunas de ellas resistentes a los antibióticos.

Los pasados 22 y 23 de febrero se celebró en Madrid la feria Expocida 2018, referente nacional para los profesionales del control de plagas urbanas. Syngenta participó en la feria presentando una novedad importante como Talon® Track, un cebo inocuo para el monitoreo de plagas de ratas y ratones, que responde a las nuevas exigencias legislativas y de los clientes, que están encaminadas hacia un Control Integrado de estas plagas, con el mínimo uso de productos tóxicos.