Una novedosa tecnología desarrollada en el proyecto LIFE SPOT utiliza una combinación innovadora de biofiltros de corcho y el uso de microalgas para el tratamiento del agua subterránea contaminada con nitratos y pesticidas. Una solución sostenible y de bajo coste que podría beneficiar a unos 20 millones de personas que viven en zonas rurales europeas.
Tratamiento del agua contaminada con nitratos y pesticidas
En las zonas rurales de los países mediterráneos como España y Francia, el agua subterránea no solo es un recurso vital, sino a menudo la única fuente de agua potable. Sin embargo, la contaminación de estas aguas amenaza la salud y la sostenibilidad de dichas comunidades.
La contaminación antropogénica por nitratos y pesticidas, en particular, ha emergido como un grave problema de calidad del agua, afectando a pequeñas y muy pequeñas fuentes de suministro de agua, cuya calidad a menudo no se monitorea adecuadamente, dejando a una proporción significativa de la población europea expuesta a riesgos sanitarios no reconocidos. Aproximadamente el 13% de las estaciones de monitoreo de aguas subterráneas en toda Europa exceden el límite de 50 mg NO3/L (Directiva 91/676/CEE), reduciendo así la cantidad de agua potable utilizable.
El proyecto LIFE SPOT, financiado por la Comisión Europea y en el que han participado cinco socios: el IRTA (Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias), el Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua (IDAEA-CSIC), la empresa FACSA, EURECAT (Centro Tecnológico de Cataluña) y Protecmed, ha abordado este problema con un enfoque innovador.
Su objetivo principal ha sido desarrollar un proceso de tratamiento, asequible y de bajo impacto ambiental, que pueda eliminar los nitratos y micropolutantes del agua subterránea contaminada, produciendo agua potable de alta calidad que cumpla con los requisitos de la normativa. Este proyecto tiene un impacto especial en las áreas rurales de la región mediterránea, donde la sostenibilidad y la resiliencia de las zonas agrícolas y turísticas son de gran importancia.
Combinación de microalgas y biofiltros
Los métodos convencionales de tratamiento de agua, como la ósmosis inversa, el intercambio de iones, la electrodialisis y la adsorción de carbono activado, aunque efectivos, son costosos. En contraste, LIFE SPOT ofrece una combinación de tecnologías de bajo coste que incluyen el uso de microalgas y biofiltros de corcho, capaces de eliminar hasta el 99% de los nitratos y el 73% de los pesticidas en aguas de las plantas piloto del proyecto.
La combinación de estas dos tecnologías representa un enfoque de tratamiento biológico que es potencialmente más sostenible y de menor costo que las tecnologías convencionales, basadas en procesos de separación físico-química. Este enfoque, que genera menos residuos y es más amigable con el medio ambiente, tiene el potencial de beneficiar a unos 20 millones de personas que viven en zonas rurales europeas.
En toda Europa, las tasas de superación de nitratos más altas se han registrado en Bélgica (30%), Dinamarca (26%), España (22%) y Chipre (19%), mientras que el 7% de las estaciones europeas de seguimiento de aguas subterráneas han notificado niveles excesivos para uno o más pesticidas (>0,1 μg/L).
Esta innovación no solo es prometedora para el consumo humano, sino que también es crucial para el sector ganadero, que enfrenta una alta demanda de agua y es una fuente significativa de contaminación del agua por nitratos y antibióticos.
El proyecto LIFE SPOT ha sido probado con éxito en tres zonas afectadas por la contaminación agrícola: Nules en Castellón, Caldes de Montbui en Barcelona y Perpiñán en Francia, donde el uso combinado de un fotobiorreactor de microalgas y un biofiltro de pellets de corcho consiguió eliminar eficazmente la mayor parte de nitratos, antibióticos y pesticidas presentes en las aguas subterráneas debido a las actividades agrícolas.
Si os interesa este tema, os recomendamos visitar la web del proyecto LIFE SPOT.