El mantenimiento higiénico de las piscinas de uso público conlleva el uso de productos químicos para el tratamiento y la desinfección del agua. Dado que pueden ser productos tóxicos, corrosivos o irritantes, es necesario seguir una serie de requisitos para almacenarlos correctamente y evitar riesgos para la salud y el medio ambiente. A pesar de que generalmente no se da suficiente importancia a estas zonas o salas de almacenaje, cumplir con la normativa nos permitirá trabajar en condiciones de seguridad.
Aunque generalmente son zonas o salas a las que se pone poca atención, los espacios destinados a almacenar los productos químicos que se utilizan para el mantenimiento higiénico de las piscinas de uso público deben cumplir con ciertos requisitos de seguridad para evitar accidentes.
El lugar donde guardamos estos productos debe considerarse independiente de las salas de máquinas o salas técnicas y mantenerse siempre inaccesible para personas no autorizadas, con el fin de evitar riesgos.
Registro de tipos de producto y cantidades
A la hora de organizar este espacio debemos tener en cuenta las características de los productos químicos que vamos a almacenar y también las necesidades de carga, descarga y trasiego de los mismos.
Un primer paso importante es determinar la peligrosidad de cada producto químico almacenado y llevar un registro siempre actualizado de la cantidad que se tiene de cada uno de ellos. Para determinar la peligrosidad de los productos químicos es fundamental, como paso previo, disponer de su Ficha de Datos de Seguridad (FDS), que debe facilitar el proveedor del producto o sustancia.
Todos los productos químicos almacenados deberán cumplir la normativa vigente en materia de etiquetado y envasado, y disponer de su correspondiente FDS, cuando esta sea obligatoria. Evitaremos almacenar de forma conjunta productos incompatibles, que puedan dar lugar a reacciones peligrosas.
Se procurará evitar derrames de producto sobre el suelo, empleando los medios de recogida apropiados a cada producto. Para ello, es importante la incorporación de cubetos de contención que puedan albergar un 110% del volumen del producto químico líquido almacenado
También hay que tener en cuenta que el almacenamiento incorrecto de algunos de estos productos puede provocar emanaciones corrosivas para materiales eléctricos y metálicos.
Adicionalmente, el Reglamento APQ (Real Decreto 656/2017, de 23 de junio, por el que se aprueba el Reglamento de Almacenamiento de Productos Químicos y sus Instrucciones Técnicas Complementarias MIE APQ 0 a 10) marca exactamente los requisitos legales para el almacenamiento de productos químicos.
Almacenamiento de desinfectantes
Los productos biocidas desinfectantes deben conservarse cerrados dentro de su embalaje y en lugar fresco, seco y bien ventilado, con una cubeta de retención de líquidos. De este modo evitaremos los riesgos que puede comportar la presencia de personas cerca de este tipo de productos.
Los desinfectantes son productos tóxicos y pueden ser irritantes para el aparato respiratorio, por lo que su manipulación debe hacerse siempre con un equipo de protección, guantes, gafas, etc., y si se trata de cloro-gas, con una máscara y filtros adecuados.
Los productos ácidos y alcalinos en forma líquida (ácido clorhídrico) o en forma sólida (bisulfato sódico, carbonato sódico), pueden atacar la piel y los ojos y en algunos casos provocar quemaduras graves, por simple contacto o proyección.
Por lo tanto, es imprescindible consultar sus fichas técnicas y utilizar los EPI’s (equipos de protección individual) correspondientes que recomiende el fabricante: gafas, guantes etc. Al diluir estos productos en los contenedores para la mezcla, se ha de evitar tirar el agua sobre el ácido. Debe tirarse el ácido con precaución encima de mucha agua.
Formación del personal
Las diversas operaciones que se realizan en los almacenamientos de productos químicos (carga y descarga, trasvases, desplazamientos, mantenimiento, limpieza, etc.), pueden suponer situaciones peligrosas (contacto con los productos, derrames, incompatibilidades en el almacenamiento, trabajos en espacios confinados, etc.), por lo que el personal que realiza estas operaciones debe haber recibido la formación adecuada, conocer con exactitud los procedimientos e instrucciones de trabajo establecidos, contar con las autorizaciones o permisos pertinentes en función de las operaciones que van a realizar y disponer de los equipos de protección individual necesarios.
Fuente: INSST y ASOFAP Guia técnica PISCINAS DE USO PÚBLICO Y PARQUES ACUÁTICOS