Revolución nanotecnológica
Los nanotubos de carbono fueron descubiertos hace aproximadamente 20 años. Dadas sus características, son ligeros como el plástico y más resistentes que el acero, se vienen desarrollando para aplicarlos en multitud de campos como la electrónica, microbiologia o alimentación.
Sin embargo, desde su descubrimiento, se han planteado cuestiones acerca de si algunos de estos materiales a nanoescala puede causar daños y socavar un incipiente mercado. La previsión de ventas de las empresas líderes en nanotubos podría alcanzar los $ 2 mil millones anuales en los próximos cuatro a siete años, según un artículo publicado en los EE.UU. ( Chemical & Engineering News).
Los nanotubos de carbono son láminas de grafito de un átomo de espesor en forma de cilindros. Pueden estar formados por una sola capa o varias. Mientras que el diámetro de un nanotubo puede variar desde unos pocos hasta decenas de nanometros, su longitud puede alcanzar cientos o miles de nanometros. Su forma puede variar, asi como su estructura atómica y los tipos de productos químicos que se les agrega y que afectan a sus propiedades, teniendo probablemente impacto sobre la salud humana y el medio ambiente.
Daños pulmonares por inhalación
En este contexto, investigadores de diversos países, coordinados por el Centro Internacional Woodrow Wilson de Washington, acaban de publicar en la revista Nature Nanotechnology un estudio en el que comprueban experimentalmente en ratones que los nanotubos de carbono de ciertas dimensiones provocan daños pulmonares y pleurales que incluso podrían desencadenar el mesotelioma, un tipo de cáncer que afecta a la pleura.
Esto ocurre solamente con aquellos nanotubos largos, mayores a 20 micrones, los cuales no pueden ser fagocitados por las células del sistema inmune. Estos nanotubos se comportan de forma muy similar al asbesto. Los resultados del estudio tienen una alta probabilidad de ser extrapolables a seres humanos.
"Los nanotubos largos y finos tienen los mismos efectos que las fibras de asbesto finas" afirma Kenneth Donaldson, profesor de la Universidad de Edimburgo y co-autor del estudio.
Sin embargo el científico afirma que "los nanotubos cortos o rizados no se comportan como el asbesto y conociendo los posibles peligros de los nanotubos largos es posible actuar para controlarlos y hacerlos seguros. Es necesario realizar más investigaciones para entender la manera de utilizar estos materiales de la manera más segura posible."
UGT alerta de la necesidad de prevención
La preocupación por la seguridad de la nanotecnología también está presente en España. La Secretaria de SAlud Laboral y Medio Ambiente de UGT en La Rioja, Cristina Antoñazas, alerta de la necesidad de tomar medidas preventivas para evitar consecuencias tan devastadoras como las del amianto. «Según los datos de un reciente estudio de la Unión Europea, de aquí al 2030, en Europa se producirán más de 500.000 muertes por exposición al amianto» afirma Antoñazas.
Por último, Antoñazas hace referencia a las medidas de prevención a adoptar en empresas con procesos nanotecnológicos facilitadas por el Departamento de la Unidad de SAlud de UGT :
-
Batas tipo 'Tirex' (últimos tejidos)
-
confinamiento del proceso
-
sistemas de ventilación local
-
filtración de aire de salida
-
utilización de filtros hepa
-
ropa para cubrir todo el cuerpo
-
guantes de nitrilo o látex y doble guante
-
utilizar gafas de seguridad
-
control de procesos
-
limpieza húmeda con filtro hepa
-
limpieza en cada turno de trabajo como mínimo
-
minimizar tiempo de exposición
-
controles médicos
Otros artículos relacionados en Higiene Ambiental:
Nanotubos de carbono, ¿un nuevo asbesto?
Riesgos emergentes en ambientes laborales
Fuente: Woodrow Wilson International Center , Diario La Rioja
Fotos: Wikimedia Commons, Wikimedia Commons, Wikimedia Commons