La empresa AirCare ha lanzado al mercado el sistema Anaximene, dirigido a la limpieza y desengrase de modo continuo y permanente de los sistemas de extracción de humos en la cocinas (campanas, conductos y extractores). Se trata de un sistema patentado y basado en el uso de la microbiología que hace innecesarias las operaciones de limpieza y desengrase.
Según la información proporcionada por la empresa, este procedimiento ofrece las siguientes ventajas:
- Campanas, conductos y extractores permanentemente limpios y libres de grasa.
- Limpieza y desengrasado de la totalidad de la instalación, con una eficacia del 100% sobre toda la superficie (campanas, conductos y extractor)
- Eliminación por completo el riesgo de incendios.
- Funcionamiento de las instalaciones estén a pleno rendimiento.
- No se precisan más operaciones de limpieza y desengrase.
- Eliminación de olores por acumulación de grasa en conductos.
- Eliminación de los olores (opcional) por vapores de la cocción de los alimentos.
- Permite prescindir de las operaciones (opcional) de limpieza y desengrase de filtros (siempre limpio).
- Una única inversión en equipamiento.
- Posibilidad de contratos de mantenimiento y/o suministro de producto.
- Resultados probados durante más de 5 años en más de 150 instalaciones.
- Amortización en un máximo de dos a tres años.
- Ahorro directo de los costes.
- Coste anual de mantenimiento inferior a las operaciones de limpieza y desengrase clásicas.
- No se necesita la utilización de ninguna técnica de limpieza ni la utilización del agua.
- Precisa de la práctica de registros, pero no en los conductos verticales.
- No supone riesgo alguno para las instalaciones eléctricas.
- Por la ausencia de agua no hay riesgo de inundaciones accidentales.
- No genera residuos: como consecuencia de la metabolización de la grasa se produce una insignificante cantidad CO2 y agua liberados al ambiente.
- Salvo la primera vez, nunca más volverá a necesitar de una programación de la actividad de la cocina para considerar la limpieza.
- Una vez la instalación ha sido limpiada y desengrasada (transcurridos dos a cuatro meses) nunca volverá a ensuciarse, eliminando definitivamente el riesgo de incendio, manteniendo la eficacia de la instalación, reduciendo la emisión de olores, etc.
El procedimiento Anaximene aparece con la intención de resolver los problemas ligados a los métodos tradicionales de limpieza (agua y detergente): necesidad de registros, riesgo para las instalaciones eléctricas y de inundaciones, generación de residuos, dificultades para una limpieza y desinfección total, poca duración de los resultados obtenidos, etc.