A partir de muestras de agua del grifo de 42 hogares, el proyecto AiguaBCN medirá contaminantes emergentes en el agua potable de Barcelona y estudiará su impacto sobre la salud de los ciudadanos. El proyecto busca voluntarios/as residentes en Barcelona que quieran participar.
El objetivo del proyecto AiguaBCN es estudiar la magnitud de la exposición de los residentes en la ciudad de Barcelona a contaminantes químicos emergentes presentes en el agua del grifo.
Para ello, se tomarán muestras de agua del grifo de 42 hogares (uno por código postal), de modo que quede representada toda la geografía de la ciudad, se mediran estos contaminantes y se creará un mapa de concentraciones en la ciudad. Se incluirán 10 muestras de agua embotellada, seleccionando las marcas más populares, y 10 muestras de agua del grifo filtrada (5 de ósmosis inversa y 5 de jarra con filtro).
El proyecto está financiado por el Ayuntamiento de Barcelona y la Fundación ”la Caixa". Lo coordinan el instituto ISGlobal junto con el Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua (IDAEA-CSIC) y la Universidad Rovira i Virgili. También colaboran el Instituto Catalán de Investigación del Agua (ICRA) y el Centro de Investigación Ambiental de Helmholtz (UFZ), Alemania.
Contaminantes emergentes
El proyecto cuantificará la contribución del agua potable a la exposición interna a las sustancias PFAS (sustancias per- y poli-fluoroalquilo) y a los ácidos haloacéticos (HAAs) analizando muestras de orina 42 voluntarios residentes en los puntos de muestreo de agua.
Las sustancias PFAS son contaminantes antropogénicos tóxicos y muy persistentes, que en la UE afectan especialmente al medio acuático. Aunque, hasta el momento, no existe una legislación armonizada en la UE sobre las PFAs en el agua, se han incluido como nuevos parámetros químicos de calidad del agua en la propuesta de actualización de la Directiva Europea del Agua, y en el futuro si quedarán reguladas a nivel individual y total. Muchas de las PFAS se consideran muy tóxicas, especialmente para el desarrollo de los niños pero también en adultos pueden producir, entre otros, daños en el hígado, cáncer de riñon y testículos o disfunciones de la glándula tiroides.
Por otra parte, los ácidos haloacéticos, que actualmente ya están regulados en la legislación europea, son subproductos de la desinfección del agua (DBPs) , cuya principal via de exposición es la ingestión. Los HAAs son una familia de DBPs que incluyen 9 sustancias químicas: los ácidos dicloro, tricloro, monobromo, dibromo, tribromo, bromocloro, bromodicloro y dibromocloroacético. El ácido dicloroacético es un HAA con una amplia evidencia de neurotoxicidad en humanos a altas dosis, mientras que otros de los HAA han mostrado capacidad de producir neurotoxicidad en estudios experimentales.
El proyecto evaluará la neurotoxicidad del agua del grifo mediante ensayos in vitro y cuantificará la contribución de las PFAS, el bisfenol A (BPA), el nonilfenol (NP), los HAAs, el clorato y el clorito a la neurotoxicidad de las muestras analizadas in vitro. La concentración de estas sustancias se medirá utilizando métodos sensibles, basados en cromatografía y espectrometría de masas.
Se buscan voluntarios
Si eres residente en la ciudad de Barcelona y quieres participar como voluntario en el proyecto AiguaBCN, debes responder un cuestionario para evaluar si eres elegible para el estudio.
Fuente: www.isglobal.org