Pronto se iniciará la temporada de baño en piscinas de uso público, que nos permitiran refrescarnos y divertirnos durante toda la época estival. La seguridad es, sin duda, lo primero pero el factor sostenibilidad tampoco deberia faltar en la gestión de estas concurridas instalaciones, con el fin de reducir su impacto sobre el medio ambiente. Vamos a ver algunos aspectos a tener en cuenta.
Piscinas y sostenibilidad medioambiental
También en el mundo de las piscinas, la sostenibilidad es un factor con peso creciente, tanto a nivel de diseño como de gestión.
El consumo eficiente de agua, energía y productos químicos son ya aspectos a tener muy en cuenta en el mantenimiento de estas instalaciones, con el fin de minimizar su impacto sobre el entorno.
Gestión eficiente del agua
Las piscinas consumen poca agua con un mantenimiento adecuado. El agua del vaso puede tratarse y conservarse de forma saludable durante varias temporadas seguidas, sin necesidad de vaciarla cada año.
Según la Asociación Española de Profesionales del Sector Piscinas (ASOFAP), en los últimos 25 años el consumo de agua de las piscinas se ha reducido casi en un 50%. Esto es debido a la fuerte innovación tecnológica en el sector y a técnicas de filtración más eficientes, asociadas a una buena circulación del agua del vaso.
La correcta recirculación del agua de la piscina nos permite mantenerla más clara y transparente, ya que el proceso de eliminación de impurezas a través del filtro es continuo y abarca al total del volumen de agua del vaso. Mantener el agua limpia nos evitará tener que renovarla más a menudo, con el consiguiente coste económico y ambiental.
El aporte de agua nueva debe evitarse si la calidad de agua de la piscina es la adecuada. Con el tiempo puede ser necesario renovar una parte del volumen del agua, aunque también la lluvia puede contribuir, total o parcialmente, a la renovación del agua. Por último, para limitar la evaporación del agua de la piscina, existen sistemas que permiten cubrir las piscinas y evitar asi el consumo innecesario de agua.
ASOFAP recomienda utilizar sistemas y tecnologias que minimicen el consumo de agua, especialmente mecanismos que reduzcan la frecuencia del lavado de los filtros, que es una operación con gran consumo de agua.
Minimizar el uso de productos químicos
Para mantener la calidad del agua dentro de los parámetros requeridos por la legislación, ASOFAP recomienda priorizar su tratamiento físico, mediante una filtración eficiente. Lo cual no quiere decir que el tratamiento químico no sea necesario, sino que potenciar la eficiencia del proceso de filtración nos puede permitir reducir el uso de productos químicos y también el consumo de la cantidad de agua de aporte.
Asi, idealmente la filtración debería ser la base, sobre la que se trabajaria el tratamiento de desinfección y regulación del pH del agua, dejando al agua de aporte y al mantenimiento una posición menos relevante como herramientas para mantener la piscina en óptimas condiciones.
Eficiencia energética de la piscina
¿Cómo podemos ahorrar energía en el funcionamiento de la piscina? Principalmente con un adecuado dimensionamiento de todo el sistema; la red de tuberias, la bomba, etc. , de acuerdo a las necesidades reales de la instalación.
Es importante también el uso de motores con altos niveles de eficiencia energética (IE2, IE3, etc...), que cumplan con requisitos de eco-diseño según la Directiva Europea EU 2009/125/CE Ecodesign.
El uso de elementos de variación de velocidad de la bomba, adecuando el consumo energético a las necesidades puntuales (y variables) de la instalación es otro aspecto a tener en cuenta.
Fuente: Guía Técnica: Piscinas de Uso Público y Parques Acuáticos, ASOFAP