Investigadores de la Universidad de Ilinois han desarrollado una nueva generación de membranas biomiméticas para el tratamiento de aguas. Se trata de unas membranas permeables y selectivas basadas en la incorporación de una proteína Aquaporin Z en un tribloque copolímero A-B-A al agua.
Estas membranas experimentales muestran una capacidad de transporte de agua significativamente mayor que en el caso de las membranas de osmosis inversa, usadas en la purificación y desalinización de agua. Están basadas en el método que usan los riñones para transportar eficientemente el agua.
Según los autores, la Aquaporin Z abre un hueco en la membrana que sólo el agua puede atravesar. Asimismo, la variación de la cantidad aplicada de dicha proteína repercute en la permeabilidad de la membrana, de forma que permite controlar el proceso.
Este avance en el tratamiento de aguas ha sido publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences. Es posible consultar un resumen en Physorg.