Las jaulas utilizadas para el transporte de aves de corral pueden estar infectadas por las heces de animales colonizados por bacterias, como Campylobacter. Sin una adecuada higiene, estos agentes patógenos pueden transmitirse al siguiente grupo de aves transportadas. Un tratamiento de las jaulas con un flujo de aire caliente reduce muy significativamente la presencia de bacterias.
Contaminación cruzada
Campylobacter es un patógeno transmitido por los alimentos que puede estar presente en la carne de ave cruda o poco cocida.
Dado que la bacteria se halla normalmente en el tracto digestivo de las aves de corral, es fácil que ésta sea depósitada, a través de la excreción fecal, en las jaulas y en los camiones cuando aves contaminadas son transportadas a las plantas de procesamiento. De este modo, pueden contaminarse otras aves libres de patógenos y los grupos de aves que sean transportadas posteriormente en las jaulas.
Microbiólogos del Agricultural Research Service (ARS) de EEUU informan de un tratamiento que reduce la contaminación cruzada de las aves de corral en las jaulas de transporte.
Tratamiento de secado de las jaulas
Estudios realizados han demostrado que el secado de las jaulas, durante 24 a 48 horas, ya sean sucias o lavadas, puede reducir o eliminar la presencia de Campylobacter detectable en el suelo de las cajas.
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Pero los tiempos de secado prolongado resultan poco prácticos, por lo que los inestigadores del ARS probaron el uso de aire caliente fluido para acelerar el proceso.
Para determinar si el efecto era debido sólo al calor o sólo al flujo de aire, se comparó el secado con flujo de aire caliente y no caliente, asi como con aire caliente estático.
Posteriormente, se midió el número de Campylobacter, Escherichia coli y coliformes en el suelo de jaulas sucias con heces, algunas lavadas y otras no, después de realizar el tratamiento de secado.
Después de un tratamiento de lavado por rociado con agua, el flujo de aire caliente aplicado durante 15 minutos redujo el número de Campylobacter a un nivel indetectable.
Según los microbiólogos, el tratamiento, aplicado a la industria, podría aportar un ahorro significativo en el tiempo de secado, lo que sugiere una posible aplicación comercial.
El calor estático a temperaturas similares no fué tan efectivo y el aire fluido no calentado fué moderadamente efectivo, pero en menor medida que el flujo de aire caliente.
Los autores concluyen que los procesadores podrian utilizar un tratamiento de aire caliente fluido para secar las jaulas entre los transportes de manadas de aves, disminuyendo la presencia de patógenos en el suelo de éstas y la potencial contaminación cruzada.
Fuente: ARS
