Investigadores españoles han analizado el uso de plaguicidas domésticos durante el embarazo y el primer año de vida de los bebés en diversas localidades del territorio español. Un 54% de embarazadas utilizaron insecticidas en el interior de las viviendas, la mayoría en el dormitorio. La exposición a estos productos durante el embarazo e infancia se ha relacionado con efectos negativos para la salud.
En el estudio, en el que participaron un grupo de 2.500 madres e hijos de Sabadell, Guipúzcoa y distintos puntos de Asturias y la Comunidad Valenciana, se llevó a cabo un seguimiento, entre los años 2003 y 2008, del uso de plaguicidas domésticos durante el embarazo y el primer año de vida de sus descendientes, etapas especialmente vulnerables a la exposición a estos productos.
En el estudio, publicado en Science of the Total Environment, también se examinan las características sociodemográficas y de estilos de vida que más se relacionan con el uso de estos plaguicidas.
La principal autora del trabajo, Sabrina Llop, del Centro Superior de Investigación en Salud Pública (CSISP) de Valencia, explica que los resultados han revelado que el 54% de las mujeres embarazadas usaron algún tipo de insecticidas en el interior de las viviendas y el 15% empleó una combinación de dos o más métodos.
"Los plaguicidas se utilizan en ambientes domésticos para controlar plagas de insectos u otros seres vivos. Las exposiciones durante el embarazo o la infancia se han relacionado negativamente con el crecimiento fetal y efectos neurológicos, así como con una mayor incidencia de la leucemia infantil", según Llop.
El 45% de las mujeres aplicaron algún tipo de insecticida en su habitación, el 5% durante todo el año, el 75% de manera estacional y el 20% de vez en cuando. El método de aplicación más frecuente utilizado en el dormitorio fue el dispositivo eléctrico (62%).
Por otro lado, el 47% de las mujeres embarazadas aplicaron insecticidas en el resto de la casa, el 7% todo el año, el 67% de manera estacional y el 26% de vez en cuando. El método más utilizado por las mujeres en los otros lugares de la casa fué el espray insecticida (69%).
El 2% de las mujeres utilizaron otros tipos de medidas de control de plagas en su dormitorio y 5% en el resto de la casa. Estas otras medidas incluían trampas para las cucarachas, polvo insecticida y medidas no químicas tales como los dispositivos de ondas. Solo el 1% de las mujeres utilizó repelentes de insectos durante el embarazo.
El 10% de las embarazadas utilizó insecticidas en el exterior de las viviendas, como en jardines o huertos y corrales con plantas, el 9% cada mes, el 14% cada 2-3 meses, el 20% 3 veces/año y el 57% ocasionalmente.
"Estos resultados son relevantes ya que permiten que dicha información pueda ser utilizada para diseñar medidas preventivas, especialmente en etapas vulnerables de la vida. Los fetos y los niños son especialmente vulnerables a la exposición a plaguicidas debido a que sus mecanismos de detoxificación no están totalmente desarrollados y a su inmadurez inmunológica ", afirma Llop.
Vías de exposición
Las principales formas de exposición a estas sustancias son la inhalación, el contacto dérmico y la ingestión no intencional. En bebés y niños la ingestión de polvo contaminado de la casa representa la vía más importante de exposición a plaguicidas residenciales.
Para los autores, los bebés pasan más tiempo en casa y, en general, llevan menos ropa que los adultos. Además, su zona de respiración está más cerca del suelo, donde los residuos de plaguicidas pueden ser más altos, y son más propensos a tener contacto íntimo con plantas, césped y otras superficies.
Características sociodemográficas que influyen
"Las mujeres multíparas, nacidas en España, con nivel de estudios más bajo, con jardín, con la residencia próxima a cultivos y pertenecientes a las cohortes de Sabadell o Valencia son las que presentaron una mayor probabilidad de uso de plaguicidas domésticos", sostiene Llop.
El uso de estos plaguicidas continuó durante el primer año de su descendencia, aunque el 20% de ellas dejó de usarlos. El espray fue el método que más se dejó de utilizar en la habitación de los participantes (del 53% durante el embarazo a 26% durante la infancia). Por el contrario, el uso de dispositivo eléctrico se mantuvo constante.
| Uso y almacenamiento prenatal de insecticidas | Uso y almacenamiento postnatal (temprano) de insecticidas | |
| Uso de insecticidas en interiores | N (%) | N (%) |
| Cualquier uso | 1328 (54) | 1046 (45) |
| Combinación de 2 o más tipos de productos | 366 (15) | 260 (11) |
| Uso en el dormitorio de embarazadas o niños | ||
| Cualquier uso | 1093 (45) | 764 (33) |
| Todo el año | 60 (5) | 32 (4) |
| Estacional | 815 (75) | 592 (77) |
| Ocasional | 218 (20) | 140 (18) |
| Esprays insecticidas | 575 (53) | 202 (26) |
| Dispositivo eléctrico | 681 (62) | 575 (75) |
| Otros tipos | 26 (2) | 77 (10) |
| Uso en otras zonas del hogar | ||
| Cualquier uso | 1142 (47) | 896 (39) |
| Todo el año | 76 (7) | 45 (5) |
| Estacional | 768 (67) | 632 (70) |
| Ocasional | 298 (26) | 219 (24) |
| Esprays insecticidas | 792 (69) | 465 (52) |
| Dispositivo eléctrico | 524 (46) | 519 (58) |
| Otros tipos | 63 (5) | 93 (10) |
| Uso exterior de insecticidas o pesticidas | N (%) | N (%) |
| Cualquier uso | 235 (10) | 194 (8) |
| Cada mes | 22 (9) | 19 (10) |
| Cada 2-3 meses | 32 (14) | 21 (11) |
| 3 veces al año | 47 (20) | 42 (22) |
| Ocasionalmente | 132 (57) | 109 (57) |
| Aplicado siempre por la embarazada | 38 (16) | |
| Aplicado a veces por la embarazada | 31 (13) | |
| Almacenado en el garaje | 87 (47) | 66 (43) |
| Almacenado en el exterior | 56 (30) | 51 (33) |
| Almacenado en otros lugares | 44 (24) | 37 (24) |
Fuente: Prenatal and postnatal residential usage of insecticides in a multicenter birth cohort in Spain, Science of The Total Environment
Articulo original: Prenatal and postnatal residential usage of insecticides in a multicenter birth cohort in Spain, Science of The Total Environment
Fuente: SINC
Foto: Flickr
