El virus del Nilo Occidental, que tiene como reservorio las aves salvajes y como vector a los mosquitos, principalmente del género Culex, está consolidando su presencia en los Estados Miembros sudorientales así como en sus países vecinos, donde ahora debe considerarse como endémico. Durante 2013 se han notificado en la UE un total de 68 casos humanos y 256 casos en países vecinos.
Según datos del Centro Europeo para Prevención y Control de Enfermedades (ECDC) durante la pasada semana se detectaron 26 nuevos casos de Fiebre del Nilo Occidental en la UE, el número más elevado por semana durante la temporada de transmisión de 2013.
El número de áreas y de países afectados también se ha incrementado, con un primer caso probable de la enfermedad detectado en Croacia y nuevas áreas afectadas en Grecia, Hungria, Italia y Rumania, donde casos humanos ya fueron reportados anteriormente.
El mapa elaborado por ECDC muestra la distribución geográfica de casos humanos declarados en la UE y paises vecinos durante 2013.
Los paises de la zona afectados con casos humanos durante 2013 son Austria (1caso), Croacia (1), Grecia (49), Hungria (3), Italia (9), Rumania (5), Macedonia (1), Israel (47), Montenegro (1), Serbia (104), Rusia (102) y Ucrania (1).
De acuerdo con la legislación europea, aquellos paises con casos declarados de Fiebre del Nilo Occidental deben adoptar medidas de control para garantizar la seguridad de la sangre y evitar la transmisión de la enfermedad a través de las transfusiones sanguíneas.
El virus del Nilo Occidental es transmitido por la picadura de mosquitos muy comúnes (Culex) y tiene a aves migratorias, que juegan un importante papel en la dispersión geográfica del virus, como hospedadores naturales. Estos factores, unidos al aumento global de las temperaturas, propician la expansión de este patógeno, que en los seres humanos tiene un período de incubación de 2 a 14 dias y que presenta un 80% de infecciones asintomáticas.
Virus del Nilo occidental, C.Goldsmith-CDC |
En los casos clínicos los síntomas van desde fiebre leve y malestar o enfermedad moderadamente grave (alta fiebre, dolor de cabeza y dolor muscular) hasta la meningitis o encefalitis, a veces fatal.
Las formas graves de esta enfermedad, que no tiene un tratamiento específico ni vacuna disponible, se manifiestan principalmente en ancianos o personas débiles.
La principal medida de prevención es reducir la exposición a la picadura de mosquitos y un intensivo control de las transfusiones sanguíneas.
Fuente: ECDC