Los controles oficiales y la garantia de cumplimiento de la normativa en el sacrificio de ovinos y equinos y de la transformación de su carne fresca, sigue presentando deficiencias en los mataderos españoles. El 50% de los establecimientos visitados por un equipo auditor de la Comisión Europea presentaron una aplicación no satisfactoria de los controles, deficiencias en el registro de establecimientos o problemas de trazabilidad.
Mejorar la seguridad alimentaria en mataderos españoles
La Oficina Alimentaria y Veterinaria de la Comisión Europea realizó el pasado mes de abril una auditoría en 6 mataderos, 4 plantas de despiece y 1 explotación de engorde de caballos, en tres Comunidades Autónomas españolas, con el fin de realizar el seguimiento de las acciones emprendidas por las autoridades españolas para subsanar deficiencias graves en los controles oficiales observadas en 2011, en una auditoria anterior, durante el sacrificio y la transformación de ovinos y equinos.
Las graves deficiencias detectadas en 2011 impulsaron la implementación de un Plan Estratégico de Mataderos de Pequeños Rumiantes y Equinos, como medida urgente para subsanar los casos de incumplimiento detectados. Como resultado de la aplicación de este Plan, en el que se evaluaron 457 mataderos, en mayo de 2013 se habia retirado la autorización a 31 líneas de sacrificio y 9 seguian suspendidas.
El Plan Estratégico era un proyecto temporal y ha concluido oficialmente, sin embargo y a pesar de los esfuerzos de las autoridades competentes, el informe de la auditoria realizada este año por la CE constata que la aplicación práctica de los controles oficiales no ha sido satisfactoria en un 50% de los establecimientos visitados.
Pese a la mejora en los procedimientos de coordinación y control, las CCAA afectadas no han identificado todas las deficiencias pertinentes, el seguimiento no ha sido siempre el adecuado y los informes no reflejaban la situación real en los establecimientos.
En 4 de los 6 mataderos visitados se detectaron deficiencias significativas, en dos de ellos graves, en relación con el mantenimiento, la distribución, la autorización y también la comprensión por parte de los explotadores de empresas alimentarias (EEA) de sus obligaciones legales.
Tres de los 6 establecimientos no cumplian las condiciones de autorización; la documentación indicaba las actividades para las que estaban autorizados los establecimientos pero no hacia referencia a sus locales, territorio y perímetro, causando confusión sobre las resposabilidades de los EEAs y los veterinarios oficiales.
En la mayoría de los casos se vio que los operadores estaban capacitados y bien formados acerca de la higiene de las operaciones. Sólo en unos pocos casos se detectó contaminación visible en canales pero, si que se detectaron excesivas salpicaduras y una esterilización inadecuada o inexistente de los instrumentos en varios establecimientos, que podrian afectar a la higiene de las operaciones.
Finalmente, uno de los mataderos de caballos presentó deficiencias graves de trazabilidad, sin que la autoridad competente las detectase ni las evitase.
El informe publicado por la Oficina Alimentaria y Veterinaria de la Comisión Europea, asi como la respuesta de las autoridades españolas a las recomendaciones realizadas en la auditoria pueden consultarse en la web: http://ec.europa.eu/food/
Fuente: Comisión Europea
Imagen: W.Commons