Los patógenos de transmisión alimentaria y los asociados al agua fueron responsables de gran parte de los casos de enfermedades transmisibles en España durante el 2016. Según datos del Sistema de Información Microbiológica (SIM) Campylobacter y Salmonella en alimentos, y Giardia lamblia en el agua destacaron como origen de un gran número de infecciones.
Sistema de Información Microbiológica (SIM)
El SIM, que forma parte de la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica (RENAVE), recoge información sobre las patologías infecciosas, confirmadas por laboratorio, para la vigilancia epidemiológica de las enfermedades transmisibles en España.
En el sistema, que recoge datos sobre 35 microorganismos con criterios de notificación estandarizados, participaron durante 2016 un total de 88 laboratorios de 11 Comunidades Autónomas. Se estima que para el año pasado el SIM tuvo una cobertura poblacional del 30%.
Con dicha información se acaba de publicar el Informe anual del Sistema de Información Microbiológica 2016, del que extraemos algunos datos relacionados con las infecciones asociadas a alimentos y al agua.
Infecciones asociadas a alimentos
Dentro del grupo de patógenos que se transmiten a las personas mediante la ingesta de alimentos contaminados, Campylobacter sigue siendo el origen del mayor número de casos.
En 2016 se notificaron 9.943 aislamientos de Campylobacter, principalmente C.jejuni, que se distribuyeron en su mayor parte en Cataluña, Pais Vasco, Aragón, Canarias, Navarra y Castilla-León. El grupo poblacional más afectado fueron los niños de 1 a 4 años de edad.
La tendencia creciente de casos de Campylobacter en España, que refleja la misma tendencia europea, continuó durante el año pasado.
La alta prevalencia de casos de campilobacteriosis humana en la UE y el hecho de que estudios hayan asociado entre un 20 % y un 30 % de estos casos a la preparación y el consumo de la carne de pollo de engorde, ha provocado recientemente la modificación del Reglamento (CE) n.º 2073/2005, que establece los criterios microbiológicos aplicables a los productos alimenticios, para incluir el control microbiológico de Campylobacter en canales de pollo. Con esta medida, se espera reducir más del 50 % de los riesgos para la salud pública derivados del consumo de carne de pollo de engorde.
La segunda bacteria que más infecciones alimentarias produjo el año pasado fué la Salmonella spp, con 5.333 casos. Tras la aplicación de programas nacionales de control de esta zoonosis, se ha conseguido una tendencia decreciente en el número de casos, que se mantiene en los últimos años. El grupo poblacional más afectado durante 2016 fué, como en el caso de Campylobacter, el de niños de 1 a 4 años.
En tercer lugar estuvo Yersinia spp (Y.enterocolitica, Yersinia pseudotuberculosis), de la que se notificaron 378 infecciones. Yersinia enterocolitica es una bacteria transmitida principalmente por los cerdos, y es la tercera zoonosis más reportada en Europa. Cuando afecta ser al humano, la bacteria produce la yersiniosis, cuyos sintomas incluyen fiebre, dolor abdominal y diarrea.
Infecta con mayor frecuencia a niños pequeños y el grupo de población más afectado en España en el 2016 fué el de niños entre 1 y 4 años.
La bacteria Listeria monocytogenes sigue en cuarta posición, con 173 casos de listeriosis, procedentes de 45 laboratorios de 9 CCAA. De estos casos, 84 se notificaron en Cataluña y 37 en Pais Vasco. La tendencia al alza en la incidencia de la listeriosis de los últimos años se mantiene.
El grupo de población más afectado por la listeriosis fueron hombres mayores de 64 años. Aunque la listeriosis no es tan común como otras enfermedades asociadas al consumo de alimentos, puede ser grave e incluso causar la muerte, especialmente en grupos vulnerables de población, como ancianos o enfermos inmunodeprimidos.
Finalmente, se notificaron 28 aislamientos de Escherichia coli verotoxigénica (VTEC) 28, procedentes de 6 laboratorios de 6 CCAA. De los casos, un 64,3% fueron hombres. La edad media fue de 28,1 años (Mín.: 1 y Máx.: 91 años). Aunque tiene una prevalencia menor que la Yersinia, la bacteria VTEC puede producir infecciones mucho más severas.
Infecciones asociadas al agua
Entre las enfermedades transmitidas por el agua, destacan Giardia lamblia y Cryptosporidium, los dos parásitos que provocan más brotes diarreicos de origen hídrico en los países desarrollados. Ambos presentan una resistencia extrema a la desinfección química y pueden estar presentes en todo tipo de fuentes hídricas.
En 2016 se notificaron un total de 1.067 infecciones por Giardia lamblia, procedentes de 42 laboratorios de 10 CCAA.
De Cryptosporidium se notificaron un total de 180 infecciones durante 2016, procedentes de 20 laboratorios de 9 CCAA. País Vasco con 75 casos y Navarra con 40 fueron las más afectadas.
Cryptosporidium destaca por afectar principalmente a niños y puede prevenirse con un tratamiento adecuado de las aguas de consumo y de recreo, en combinación con una correcta higiene personal. En 2016 los grupos de población más afectados fueron niños de entre 1 y 4 años, asi como de 5 a 9 años.
Fuente: Sistema de Información Microbiológica. Centro Nacional de Epidemiología. Instituto de Salud Carlos III. Informe anual del Sistema de Información Microbiológica 2016. Madrid, 2017.
