Ocho mil trabajadores vascos podrían morir prematuramente en los próximos años a causa de haber estado en contacto con el amianto, hecho que podría llevarles a desarrollar un cáncer de pleura. Lo dice la Asociación de Víctimas del Amianto de Euskadi (Asviame).
Esta asociación surge con el soporte del sindicato CCOO y de Javier Madrazo, consejero de Vivienda y Asuntos Sociales. Pretende que la terrible situación en que se encuentran miles de vascos sea conocida y que la administración central les compense económicamente (y también que tome las medidas de vigilancia y control necesarias) por los perjuicios ocasionados por una situación en que el uso del amianto era masivo. La razón: es un mineral resistente a altas teperaturas y por lo tanto podía ser usado como aislante en hornos, tuberías, etc.
Esta es una situación que no está ocurriendo ahora, pero sí es en este momento cuando aparecen las primeras consecuencias. Las empresas responsables y las aseguradoras, al parecer, miran para otro lado para no tener que afrontar responsabilidades. Asviame, por su parte, va a intentar armar todo el ruido posible para que esta situación no pase desapercibida, se compense a los afectados y no vuelva a ocurrir en el futuro.
Fuente: El correo digital (recibido de un lector).
Fotografías: Aaron Suggs.