El transporte público británico parece ser un objetivo apreciado por plagas como cucarachas, chinches, pulgas, ratas y ratones, que infestan vagones y autobuses o roen y perforan cables paralizando los trenes.
Desde cucarachas hasta pulgas
Los ferrocarriles ingleses combaten contra chinches, pulgas y otros bichos que infestan el mobiliario y los colchones de las literas o los coches cama en una lucha difícil y que cuesta miles de libras al año. La situación estaría propiciada por la deficiente limpieza, el uso de muebles de segunda mano, las cálidas temperaturas y los viajeros procedentes de paises cálidos.
Al parecer, los trenes de cercanias ingleses están infestados de bichos, desde cucarachas hasta pulgas, pudiendo contener un convoy hasta mil cucarachas y sus asientos cientos de pulgas y chinches. Este fenómeno preocupa a las autoridades británicas pero no lo consideran realmente peligroso para la población.
Expertos indican que son plagas difíciles de tratar. "A menudo se esconden en lugares ocultos, tales como accesorios de iluminación y en el bastidor de las camas. Además se están haciendo más resistentes a los insecticidas. "La falta de higiene y los restos de comida que los viajeros dejan en los asientos potenciarian la proliferación de estas plagas, que no sólo afecta al ferrocarril sino a otros medios de transporte como el bus.
El aumento más pronunciado en los brotes se encontraría en el área de Manchester, donde las quejas de los pasajeros se han incrementado un 179%. Nottingham ha visto un aumento de 98%, mientras que en el noreste las llamadas de Londres han aumentado un 57%.
Ratas y ratones devoran el cableado eléctrico
Por si fuera poco con las cucarachas, chinches y pulgas, también las ratas y ratones dan que hacer a los responsables del transporte en el Reino Unido, que van a gastar millones de libras en impedir que estos roedores perforen con sus dientes el cableado eléctrico de los 32.186 kilómetros de vías del país.
Sin ir más lejos, un pequeño agujero abierto por roedores en un grueso cable de alta tensión provocó un corte de corriente en la línea principal de la costa oeste en Cheshire, que causó la cancelación de 20 trenes y retrasos en otros 99.
Para evitar situaciones como ésta, se ha puesto en marcha un programa de dos años para reforzar las defensas del sistema ferroviario mediante cables de acero blindados de reemplazo. ¿Será suficiente?
Fuente: Treneando