Las dioxinas y los policlorobifenilos (PCB) similares a las dioxinas siguen preocupando como contaminantes en determinados alimentos, ya que las estimaciones de la exposición alimentaria humana crónica indican que se supera significativamente la ingesta semanal tolerable. La CE ha reducido los contenidos máximos de dioxinas y PCBs en determinados productos cárnicos, la leche, productos lácteos y huevos.
Dioxinas y PCB en los alimentos
Las dioxinas y los bifenilos policlorados (PCB) similares a las dioxinas son sustancias químicas tóxicas, que persisten en el medio ambiente y se acumulan en la cadena alimentaria, especialmente en la grasa animal. Ambos contaminantes tienen su origen en la actividad humana; las dioxinas se generan en diversos procesos térmicos e industriales como subproductos no deseados, mientras que los PCB se utilizaban de manera generalizada en numerosas aplicaciones industriales hasta su prohibición en la década de 1980.
Las dioxinas y los PCB se encuentran en concentraciones bajas en numerosos alimentos y representan un peligro de seguridad alimentaria. Se ha demostrado que la exposición prolongada a estas sustancias causa diversos efectos adversos en los sistemas nervioso, inmunitario y endocrino, altera la función reproductora y puede causar cáncer.
A pesar de que la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) estableció en el 2018 una ingesta semanal tolerable de 2 pg de EQT (equivalentes tóxicos)/kg de peso corporal/semana para la suma de dioxinas y PCB similares a las dioxinas, las estimaciones actuales de la exposición alimentaria humana crónica a estos contaminantes indican que se supera de forma significativa la ingesta semanal tolerable en las poblaciones de todos los grupos de edad.
Por otra parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) está llevando a cabo actualmente una revisión de los valores WHO2005-TEF (Factores de equivalencia tóxica) para compuestos similares a las dioxinas, incluidos algunos bifenilos policlorados (PCB). Mientras que no concluya esta revisión, previsiblemente en el 2023, y con el objetivo de ofrecer un elevado nivel de protección de la salud humana, la CE ha modificado el Reglamento (CE) n.o 1881/2006 para establecer nuevos contenidos máximos de dioxinas y PCB en determinados alimentos.
Nuevos contenidos máximos de dioxinas y PCB
Las modificaciones en los contenidos máximos de dioxinas y PCB similares a las dioxinas aplican sobre la carne y productos cárnicos, leche, productos lácteos y huevos.
En carnes y productos cárnicos se amplia el número de productos alimenticios a los que se debe aplicar la legislación, que pasan a ser los siguientes: bovinos, ovinos y caprinos, aves de corral, cerdos, caballos, conejos, jabalíes, aves de caza silvestres y venados.
En los hígados de animales terrestres y sus productos derivados se diferencian tres categorias y se establecen nuevos contenidos máximos.
En el apartado de la carne de pescado y productos de la pesca y productos derivados, se especifica que los contenidos máximos son de aplicación también en la carne del abdomen de cangrejos y crustáceos similares, ya que ésta también es consumida.
Respecto a la leche y los productos lácteos se reducen los contenidos máximos de dioxinas y la suma de dioxinas y PCB similares a las dioxinas.
Y finalmente, en el caso de los huevos se amplia el contenido máximo aplicable actualmente a los huevos de gallina a todos los huevos de aves de corral, exceptuando los de gansa.
Los productos alimenticios indicados en el Anexo que hayan sido comercializados legalmente antes del 1 de enero de 2023 podrán seguir en el mercado hasta su fecha de consumo preferente o su fecha de caducidad.
REGLAMENTO (UE) 2022/2002 DE LA COMISIÓN de 21 de octubre de 2022 por el que se modifica el Reglamento (CE) n.o 1881/2006 en lo que respecta a los contenidos máximos de dioxinas y policlorobifenilos similares a las dioxinas en determinados productos alimenticios
