EFSA ha establecido especificaciones técnicas para la armonización, a nivel de la UE, de la vigilancia y notificación de las zoonosis, la resistencia antimicrobiana y los brotes de origen alimentario. El objetivo es conseguir un análisis y una interpretación correcta de la información sobre seguridad alimentaria a nivel de los estados Miembros y guiarlos en la implementación de programas de vigilancia basados en el riesgo.
La recopilación de los datos sobre la seguridad alimentaria a nivel de los Estados Miembros es una parte crucial de la labor de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA). Estos datos contribuyen de manera importante a la evaluación de riesgos llevada a cabo por la EFSA, proveen información sobre la situación actual y ayudan a informar a los gestores de riesgo y a los Estados miembros sobre los acontecimientos.
Para optimizar esta recogida de información, EFSA ha establecido criterios para la vigilancia y notificación de parásitos y bacterias zoonóticas asociadas a los alimentos, las zoonosis no asociadas a alimentos, los brotes alimentarios y la resistencia antimicrobiana.
Armonización de la vigilancia de bacterias zoonóticas asociadas a los alimentos
El control de la Salmonella en las aves de corral (Gallus gallus) y las poblaciones de pavos, está armonizado por los programas nacionales de control de Salmonella, requeridos por la legislación europea.
Cada rebaño de aves se controla en puntos establecidos de la producción en granjas, utilizando los mismos tipos de muestras y métodos analíticos normalizados. La comparación de datos permite saber si se han cumplido los objetivos para la reducción de Salmonella en los países.
La legislación de la UE también establece normas armonizadas de vigilancia para la tuberculosis bovina y la brucelosis en el ganado bovino y pequeños rumianes, en granjas y mataderos. Los datos que se derivan de esta vigilancia permiten realizar un seguimiento de la incidencia de estas enfermedades y una evaluación del impacto de los programas de erradicación en Estados Miembros afectados.
EFSA ha establecido especificaciones para la vigilancia y notificación de Escherichia coli verotoxigénica (VTEC) y Yersinia enterocolitica en alimentos y animales. Se ha propuesto una estrategia de muestreo para VTEC, con el objetivo de estimar la prevalencia de VTEC O157 en el matadero, principalmente en la piel de animales jóvenes y también en las manadas de ovino.
Imagen: FLickr |
Además de la vigilancia de VTEC O157, que es el serogrupo con mayor frecuencia en los casos de VTEC en humanos en la UE, los Estados miembros pueden ampliar el seguimiento a los serogrupos de VTEC O26, O103, O111 y O145, que también se identifican como causas de infecciones humanas.
En el caso de Yersinia enterocolitica, las especificaciones armonizadas de supervisión incluyen el muestreo de los cerdos y la estimación de la prevalencia de esta bacteria en las amígdalas de los cerdos en el matadero. Los aislamientos se biotipificarán con el fin de estimar la prevalencia de tipos de Yersinia enterocolitica patógenos para humanos.
Los métodos de muestreo y de análisis que se aplicarán para la Salmonella y Listeria monocytogenes están armonizados en cierta medida por el Reglamento (EC) 1441/2007 sobre análisis de criterios microbiológicos en alimentos.
Por otra parte, EFSA ha financiado la elaboración de protocolos y métodos de encuestas para estimar la prevalencia de patógenos en productos alimenticios específicos, en un punto determinado de la cadena alimentaria, que cubren Salmonella, Campylobacter, VTEC, Y. enterocolitica y L. monocytogenes en diferentes categorías de alimentos.
Armonización de la notificación de brotes de origen alimentario
La información sobre los brotes de origen alimentario proporcionan datos interesantes sobre la relevancia de las diferentes categorías de alimentos como vehículos en los brotes y sobre los agentes causales más frecuentes asociados a éstos.
Las primeras especificaciones armonizadas para la presentación de informes brotes de origen alimentario fueron emitidos por la EFSA en 2007 y tres años después de su aplicación, fueron revisadas y actualizadas en 2011. Según estas especificaciones, los brotes alimentarios se clasifican basándose en la solidez de la evidencia que implica a un alimento como vehículo del brote. Un informe detallado sobre agentes causantes, el alimento vehículo de la infección y los factores de manipulación y preparación de los alimentos, debe realizarse solamente cuando la evidencia de la implicación de un alimento en el brote es fuerte y está basada en una evaluación de todas las pruebas disponibles.
Armonización de la vigilancia y notificación de la resistencia antimicrobiana
Recientemente EFSA ha publicado un informe con propuestas para mejorar la armonización del control y notificación de la resitencia antimicrobiana en animales y carne destinados a la producción de alimentos
El informe sugiere que, dado que la prevalencia de la Salmonella está disminuyendo, la vigilancia de la resistencia a los antimicrobianos deben aplicarse a bacterias indicadoras de contaminación, como E. coli y enterocci. El seguimiento y la presentación de informes debería ser llevado a cabo específicamente en las poblaciones de animales, y alimentos derivados de ellos, que están en riesgo de albergar cepas resistentes.
En el caso de la Salmonella, estas poblaciones son las gallinas ponedoras, los pollos de engorde y las manadas de pavos de engorde, los cerdos de engorde, los terneros menores de un año de edad y la carne de pollos, pavos, cerdos y bovinos.
C. jejuni se debe controlar en pollos de engorde y la carne de pollo, y C. coli y en los cerdos de engorde. E. coli y enterococci deben ser controlados en pollos de engorde, cerdos de engorde y en terneros menores de un año de edad y en la carne de pollo, porcino y bovino.
Asimismo, el informe de EFSA introduce un umbral (tamaño de la población) para algunas poblaciones de animales y de su carne, para determinar si el monitoreo de la resistencia antimicrobiana debe ser obligatoria.
Fuente: EFSA
Harmonisation of monitoring zoonoses, antimicrobial resistance and foodborne outbreaks, EFSA, 2012