Las actividades de limpieza y desinfección pueden originar situaciones de riesgo para la salud y el medioambiente si no se siguen ciertas pautas y precauciones en el uso de productos químicos. Para una limpieza segura es importante la información sobre el producto, la formación sobre su uso y disponer de una equipación adecuada.
¿Qué información hay que tener en cuenta con el fin de utilizar de forma segura productos químicos en actividades de limpieza y mantenimiento de espacios?.
Los siguientes pasos nos ayudaran a utilizar correctamente y con seguridad los productos de limpieza:
1. Leer siempre la etiqueta del producto que se utiliza.
2. Si hay alguna indicación de peligro, hay que seguir las recomendaciones que se indican en la etiqueta.
3. Utilizar siempre el producto adecuado para hacer el trabajo a realizar.
Los pictogramas y otros iconos informativos
La forma más directa de obtener información sobre la peligrosidad de un producto de limpieza es a través de los pictogramas adosados a la etiqueta del envase. Un pictograma de peligro es una imagen que incluye un símbolo de advertencia y colores específicos, con el fin de transmitir información sobre el daño que una determinada sustancia o mezcla puede provocar a la salud o al medio ambiente. El Reglamento CLP regula el sistema de clasificación y etiquetado de las sustancias químicas peligrosas en la Unión Europea.
Mayoritariamente los productos de limpieza y mantenimiento pueden estar considerados irritantes para las vías respiratorias, los ojos y la piel. Un ejemplo serían los desengrasantes o los detergentes amoniacales.
Otros, como las lejías o los desincrustantes, son corrosivos e irritantes para las vías respiratorias, los ojos y la piel.
También puede haber productos de tipo inflamables o comburentes.
Los productos de limpieza comercializados son seguros si se utilizan de forma adecuada. Los pictogramas están ahí para llamar la atención del usuario sobre los peligros que algunos productos pueden presentar. Siempre que se sigan las instrucciones de la etiqueta, los usuarios del producto no están expuestos a esos peligros.
Ropa y equipos de protección adecuados
No sólo la información sobre los productos que utilizamos es importante. Para trabajar con seguridad necesitaremos también una equpación adecuada:
- ROPA: Utilizar ropa de trabajo cómoda que facilite los movimientos. Cambiarse de ropa antes y después de trabajar. En caso de que la ropa se salpique o se moje con los productos de limpieza, hay que quitársela y cambiarla por una limpia y seca.
- CALZADO: Utilizar calzado cómodo, cerrado y de suela de goma antideslizante
- GUANTES: Utilizar guantes cuando se manipulen directamente productos de limpieza. Los guantes serán resistentes a los productos químicos utilizados y se han de ajustar bien. Una buena opción son los guantes de nitrilo o vinilo. Los guantes de látex pueden producir alergias. Los guantes deben sustituirse a menudo. Si los guantes se estropean o entra algún producto dentro de los guantes, es necesario lavarse bien las manos inmediatamente y sustituirlos.
- GAFAS Y MASCARILLA: Aunque no es habitual el uso de equipos de protección respiratoria en las tareas de limpieza, será necesario utilizar mascarilla si la etiqueta del producto así lo indica. Existen dos tipos fundamentales de mascarillas: las que protegen de polvo y aerosoles y las que protegen de gases y vapores. Las mascarillas tienen que ajustar bien. Utilizar gafas de protección si la etiqueta así lo indica, como protección ante posibles salpicaduras.
Usar los productos de forma segura
El uso seguro de los productos está estrechamente ligado con una buena formación del trabajador:
- Es necesario que el trabajador/ora reciba formación e información sobre sus riesgos.
- Se utilizarán prioritariamente los productos de limpieza menos peligrosos.
Es preferible el uso de agua y trapos de microfibra antes que utilizar productos químicos.
Es conveniente disponer de una lista con los productos adecuados para cada uno de los espacios a limpiar, y si es necesario algún equipo de protección personal.
Destinar un espacio adecuado para guardar de forma ordenada los productos y utensilios de limpieza.
- Cuando se utilicen productos de limpieza peligrosos, mantener ventilada la zona.
- Es mejor poner el producto encima de una esponja o de un trapo que vaporizarlo.
En los casos que se tenga que diluir el producto (por ej. En la limpieza de suelos), primero se añadirá agua en el cubo o envase y después se verterá el producto poco a poco.
Utilizar la cantidad adecuada de producto, respetar la dosis recomendada en la etiqueta del producto.
- No se han de mezclar nunca los productos de limpieza, ya que pueden provocar mezclas de mayor toxicidad. Por ejemplo, no mezclar nunca amoníaco y lejía.
- No utilizar un producto del que no se dispone información o que no está correctamente identificado o etiquetado
- Mantener siempre los productos en sus envases y con la etiqueta original.
Si es necesario hacer un trasvase a otro envase, etiquetar de manera muy clara el nuevo envase.
No hacer nunca trasvases a botellas o envases destinados a productos alimentarios.
- Mantener los envases cerrados cuando no se utilicen.
- No oler nunca el contenido de los envases.
- No fumar, beber o comer durante la manipulación de los productos de limpieza.
- Alejar los envases con productos de limpieza de los puntos de calor (por ejemplo radiadores, encimera de la cocina, etc.) a fin de evitar incendios o explosiones.
Hay que evitar la utilización de productos insecticidas.
En caso de que se utilicen insecticidas, seguir rigurosamente las instrucciones del fabricante.
- Lavarse las manos después de manipular los productos. En especial antes de comer y antes de irse del lugar de trabajo.
Fuente: Generalitat de Catalunya, Direcció General de Relacions Laborals i Qualitat en el Treball Institut Català de Seguretat i Salut Laboral