Se acerca el verano y con él un mayor trasiego de turistas y actividad en todo tipo de establecimientos turísticos. La pandemia de Covid-19 sigue condicionando nuestros desplazamientos y contactos sociales pero seguro que tendremos ocasión de disfrutar de momentos de descanso y diversión fuera de casa. Los protocolos de higiene en los establecimientos turísticos y la restauración seran cruciales para el bienestar de todos.
Entre la aparición de nuevas variantes del SARS-CoV-2 y la tortuosa campaña de vacunación nos vamos acercando a la segunda temporada estival de la pandemia, con nuevas evidencias en cuanto a los mecanismos de transmisión del virus y las medidas que mejor pueden ayudar a limitarla, como es el caso de la correcta ventilación de los espacios interiores.
Aunque en este escenario de pandemia todos somos corresponsables en la prevención del contagio comunitario, los protocolos de higiene en los establecimientos turísticos y la restauración son clave para proteger, tanto a los usuarios de sus servicios como al propio personal que trabaja en ellos.
Con la prevista finalización del estado de alarma el próximo 9 de mayo y la consiguiente desaparición de las medidas limitativas de contención, no podemos bajar la guardia en la prevención ya que la crisis sanitaria no está resuelta y los interrogantes sobre cuestiones como las nuevas variantes del virus o posibles nuevas cadenas de transmisión no identificadas siguen abiertos.
Con este objetivo, el pasado 30 de marzo se publicó la Ley 2/2021, de 29 de marzo, de medidas urgentes de prevención, contención y coordinación para hacer frente a la crisis sanitaria ocasionada por el COVID19, en la que se establecen medidas de prevención que, una vez finalice el estado de alarma, deberán seguir cumpliéndose. Entre ellas, vamos a ver algunas que afectan a los establecimientos turísticos, actividades de restauración y demás instalaciones, que nos ayudaran a pasar un verano seguro.
Protegiendo al trabajador
En todos los centros de trabajo serán protagonistas las medidas de ventilación, limpieza y desinfección adecuadas, asi como evitar la coincidencia masiva de personas, tanto trabajadores como clientes o usuarios durante las franjas horarias de previsible mayor afluencia. Los establecimientos también deberán poner a disposición de los trabajadores agua y jabón, geles hidroalcohólicos o desinfectantes con actividad virucida, autorizados y registrados por el Ministerio de Sanidad para la limpieza de manos.
Es importante también que todos los centros de trabajo deberán estar preparados con un plan de respuesta para reaccionar si uno de los empleados o clientes presenta síntomas de Covid-19.
Hoteles y alojamientos turísticos
Los titulares de hoteles, alojamientos turísticos y otros alojamientos de corta estancia, campings, aparcamientos de caravanas, etc. deberán cumplir las normas de aforo, desinfección, prevención y acondicionamiento que determinen las autoridades competentes.
En particular, se asegurará que en las zonas comunes de dichos establecimientos se adoptan las medidas organizativas oportunas para evitar aglomeraciones y garantizar que clientes y trabajadores mantengan una distancia de seguridad interpersonal mínima de 1,5 metros. Cuando no sea posible mantener dicha distancia de seguridad, se tomarán las medidas de higiene adecuadas para prevenir los riesgos de contagio.
Actividades de hostelería y restauración
De forma similar, los titulares de bares, restaurantes y demás establecimientos de hostelería y restauración deberán cumplir las normas de aforo, desinfección, prevención y acondicionamiento que determinen las autoridades competentes.
En cualquier caso, deberán evitarse aglomeraciones tanto dentro del establecimiento como en los espacios de terrazas autorizados, y garantizar que clientes y trabajadores mantengan una distancia de seguridad de, al menos, 1,5 metros y si no es posible se aplicaran las medidas de higiene adecuadas para prevenir los riesgos de contagio.
Buenas prácticas de higiene frente a la Covid-19
Para cumplir con las medidas de prevención que continuaran siendo necesarias y obligatorias en el futuro, instaurar una cultura de buenas prácticas de higiene frente a la Covid-19 será, más que nunca, una herramienta de mejora y un valor añadido para cualquier establecimiento turístico.
Teniendo en cuenta las características de cada actividad y tras realizar una evaluación de riesgos, los establecimientos deben adaptar su plan de limpieza y desinfección para adecuarlo a la prevención de los contagios.
Especial atención necesitará la ventilación/aireación diaria de los espacios, según el uso que se haga de ellos, asi como programar la frecuencia de las limpiezas e Incluirlas en el plan APPCC cuando sea necesario, o incrementar las frecuencias diarias de limpieza y repasos, especialmente de las zonas de mayor contacto.
La formación del personal que utiliza productos biocidas de uso profesional es otro punto clave. Los productos de limpieza y, especialmente, los de desinfección deben utilizarse en las cantidades, concentraciones y tiempos adecuados para que su acción sea efectiva. El personal debe saber cómo, cuándo y dónde utilizar los productos de limpieza y desinfección, de acuerdo a las fichas de datos de seguridad de los productos y utilizando siempre que sea necesario los EPI's correspondientes.
En definitiva, unas buenas prácticas para garantizar la correcta limpieza y desinfección en instalaciones turísticas nos ayudaran esta próxima temporada para minimizar el riesgo de contagio por Covid-19, tanto si estamos disfrutando de la estancia en un establecimiento como si estamos trabajando en él.
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