En el actual contexto de aumento del riesgo de enfermedades transmitidas por mosquitos en la UE, es una prioridad mejorar la vigilancia y optimizar las formas de controlar las poblaciones de mosquitos, no sólo los invasores sino también los autóctonos. Un estudio realizado en la ciudad de Barcelona analiza el impacto de las infraestructuras hídricas urbanas, como los imbornales, sobre la proliferación de poblaciones de mosquitos.
Enfermedades transmitidas por mosquitos
Hace unos días, el Centro Europeo para Prevención y Control de Enfermedades (ECDC) alertaba de un aumento del riesgo de enfermedades transmitidas por mosquitos en la UE/EEE, debido a la propagación de las especies invasoras Aedes albopictus (mosquito tigre) y en menor medida Aedes aegypti (mosquito de la fiebre amarilla) en el continente europeo. Las olas de calor y las inundaciones son cada vez más frecuentes y los veranos más largos y cálidos, lo que crea condiciones más favorables para las especies de mosquitos invasores. Según los expertos del ECDC, si esta tendencia continua, muy posiblemente podemos esperar en la UE/EEE más casos de dengue, chikungunya y zika.
Para gestionar este problema de salud pública sería crucial, entre otros factores, mejorar la vigilancia y optimizar las formas de controlar las poblaciones de mosquitos, no sólo los invasores sino también los autóctonos con capacidad vectorial. Un ejemplo de ello es la gestión que la Agència de Salut Pública de Barcelona (ASPB) lleva a cabo en el programa de vigilancia y control de mosquitos en Barcelona, una ciudad con fuertes conexiones con paises endémicos de arbovirus.
Control de mosquitos en Barcelona
En sus programas de vigilancia y control de plagas, la ASPB aplica el concepto del control integrado, basándose en un diagnóstico previo del problema y priorizando el control biológico, físico o mecánico, mientras que el uso de biocidas específicos se reserva para situaciones puntuales. En sus estrategias para el control de vectores, la ASPB busca unir el conocimiento científico con la gestión práctica de control y vigilancia, para mejorar los resultados. Entre otros, podemos citar sus proyectos dedicados al estudio de las gaviotas BCNGulls y su impacto sobre la salud pública, o BCNRats un proyecto dedicado al estudio de las ratas de alcantarilla y su relación con la transmisión del parásito Leishmania infantum.
En el caso de los mosquitos, el estudio "Spatial distribution and temporal dynamics of invasive and native mosquitoes in a large Mediterranean city" publicado recientemente en la revista Science of The Total Environment, analiza el impacto de infraestructuras hídricas de Barcelona que son lugares artificiales propicios para la oviposición, los imbornales y las fuentes, sobre la proliferación de poblaciones de mosquitos en la ciudad de Barcelona, y destaca la utilidad de los modelos predictivos para optimizar su control.
El estudio ha sido realizado por investigadores de la Estación Biológica de Doñana (EBD-CSIC), la Universidad de Granada (UGR), el CIBER de Epidemiología y Salud Pública y la ASPB.
Infraestructuras hídricas y condiciones climáticas
El trabajo se basa en datos recopilados por la ASPB durante el programa local de control de vectores en la ciudad (234.225 visitas a 31.334 alcantarillados diferentes y 1.817 visitas a 152 fuentes) entre 2015 y 2019, en las que se monitorizó la presencia/ausencia de larvas y pupas de Aedes albopictus, Culex pipiens y Culiseta longiareolata, las tres especies de mosquitos predominantes en el alcantarillado y las fuentes de Barcelona.
Además de reducir las molestas picaduras, en el caso de las dos primeras especies las actuaciones de prevención, vigilancia y control están dirigidas también a minimizar la posibilidad de transmisión de enfermedades, como el dengue, el chikungunya o la fiebre del Nilo Occidental.
El objetivo principal del estudio fue identificar variaciones en la dinámica de las poblaciones de mosquitos en imbornales y fuentes de la ciudad respecto a tres factores: los distintos tipos de alcantarillado, las condiciones climáticas (temperatura y la lluvia), y los cambios en las estrategias de gestión de la plaga, como pueden ser modificaciones en los tratamientos con larvicidas.
Los imbornales de Barcelona se clasificaron en tres tipos: los de sifón, los areneros y los directos. Los dos primeros propiciaron la acumulación de agua y la creación de criaderos, mientras que los imbornales directos no acumularon agua y no representaron un riesgo para la proliferación de larvas de mosquitos.
Las fuentes se categorizaron en fuentes naturalizadas, sin recirculación o cloración de agua y con vegetación, y fuentes ornamentales, que podían tener vegetación, cloración y sistema de recirculación.
Clasificación de los tres tipos de alcantarillado en la ciudad de Barcelona.
Fuente: M. Ferraguti y otros: Spatial distribution and temporal dynamics of invasive and native mosquitoes in a large Mediterranean city
En el estudio se realizó un análisis de los procesos de colonización y recolonización de las larvas de mosquitos en estas infraestructuras con agua. Se detectó una mayor presencia de larvas en los imbornales areneros, en comparación con los de sifón o los directos, mientras que en las fuentes, la presencia de vegetación y el uso de agua naturalizada influyeron positivamente en la aparición de larvas. Por otra parte, las condiciones climáticas jugaron un papel crítico en la colonización y la recolonización de imbornales y fuentes. La presencia de mosquitos siguió patrones no lineales y, en general, aumentó a temperaturas intermedias y niveles de lluvia acumulada.
Los datos obtenidos en este estudio llevaron al inicio de un programa por parte de la ASPB para convertir los areneros en imbornales directos, mediante la adición de una capa de hormigón en la parte inferior de los imbornales, para prevenir la acumulación de agua y la reproducción de mosquitos. Se espera que la implementación de este programa tenga un impacto significativo en la reducción de las poblaciones de mosquitos en las áreas afectadas.
Distribución de fuentes (ornamental y naturalizada) y proporción de tipos de alcantarillas (directo, sifón, arenero) en los distritos de Barcelona
Fuente: M. Ferraguti y otros: Spatial distribution and temporal dynamics of invasive and native mosquitoes in a large Mediterranean city
Aplicación de larvicidas
Se constató también que la aplicación de tratamientos larvicidas ( Bacillus thuringiensis israelensis (Bti)) redujo significativamente la presencia de larvas. Sin embargo, las tasas de recolonización de los espacios tratados se vieron afectadas negativamente por el tiempo transcurrido desde el tratamiento, dándose la recolonización de 10 a 25 días tras el tratamiento.
El estudio ha proporcionado información valiosa sobre la tendencia de los mosquitos a reproducirse en imbornales específicos. El análisis realizado reveló que solo una pequeña fracción de las alcantarillas monitoreadas presentaban larvas de mosquitos, lo que permite no sólo priorizar la modificación de los imbornales sino también aumentar la frecuencia de aplicación de biocidas de forma específica en aquellos con mayor presencia de mosquitos. Todo ello favorece la aplicación de medidas de control más efectivas y rentables.
Los autores concluyen que los modelos predictivos de distribución de mosquitos permiten una gestión dirigida y la priorización de los esfuerzos de prevención, lo que reduce el costo de los programas de vigilancia y control. Es un enfoque que permite que la gestión práctica de control y vigilancia genere datos científicos valiosos, aplicables a una mejora continua de las estrategias de gestión, y que aporta resultados más eficientes y sostenibles.
Fuente: M. Ferraguti, J. Martínez-de la Puente, S. Brugueras, J.P. Millet, C. Rius, A. Valsecchi, J. Figuerola, T. Montalvo, Spatial distribution and temporal dynamics of invasive and native mosquitoes in a large Mediterranean city, Science of The Total Environment, Volume 896, 2023
