El Ayuntamiento de Valladolid ensaya nuevos métodos de control de palomas en la ciudad. Se trata de palomares móviles, que son ubicados en zonas diversas de la ciudad, y que permiten la entrada de las aves atraidas por alimento pero no su salida. Los técnicos tratan al año en Valladolid 152 quejas de los ciudadanos provocadas por las palomas.
Captura y "adopción"
El Ayuntamiento de Valladolid experimenta en los últimos meses con nuevos sistemas para controlar la población de palomas en la ciudad, después de que el lanzamiento de redes con cañones para capturar grandes grupos fuese criticado por algunos ciudadanos al considerarlo cruento.
Los técnicos veterinarios están probando unos palomares móviles, que permiten la entrada de las aves atraidas por el alimento, pero no su salida.
La primera de estas jaulas se ha colocado en fase de pruebas el patio del colegio público Miguel de Cervantes.
El objetivo es situar los palomares en diferentes zonas públicas de la ciudad durante aproximadamente diez días.
Una vez que los técnicos consideran que ya hay suficientes ejemplares capturados, las palomas se recogen y se entregan a la Asociación de Colombicultores, que se ocupa de ellas para la cría de pichones en cautividad.
El pasado año el Consistorio capturó 6.000 ejemplares, un millar más que en el 2007.
Jornadas técnicas sobre aves-plaga
Precisamente esta misma semana tuvieron lugar en Valladolid unas Jornadas Técnicas sobre aves plaga, organizadas por la Asociación Española de Veterinarios Municipales y sobre las que Higiene Ambiental publicó un artículo el pasado 1 de abril.
Y es que el asunto preocupa y mucho. Expertos de toda España analizaron los métodos para controlar la población, entre otras, de ésta especie, que daña edificios con sus excrementos y puede transmitir parásitos y enfermedades.
Las deyecciones de las palomas conllevan la emisión de orina y el ácido úrico al transformarse en alantoína alcanza un alto poder corrosivo de los elementos pétreos y metálicos.
Los excrementos y plumas también provocan daños en canalones y bajantes.
Por otra parte estas aves generan ectoparásitos como garrapatas, pulgas o piojos y pueden transmitir al ser humano salmonelosis o hictoplasmosis, entre otras enfermedades.
Columba livia
La especie Columba livia es la más cosmopolita. Es capaz de realizar entre cinco y diez puestas al año, cada una de ellas de dos huevos. Los pichones alcanzan su madurez sexual a los seis meses. En un caso extremo, una pareja de palomas puede generar en un año 50 ejemplares.
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Fuente: El Norte de Castilla
Fotos: Wikimedia Commons , Wikimedia Commons
