El Programa de Revisión de sustancias activas biocidas de la UE necesita acelerar sus procesos si se quiere alcanzar el objetivo establecido de completarlo para finales de 2024. Desde el inicio del Programa, en el 2004, sólo se han concluido las evaluaciones de 250 combinaciones de sustancia activa y tipo de producto, de las más de 700 que deben ser evaluadas.
La Comisión Europea inició en el 2004 el Programa de Revisión de sustancias activas biocidas de la UE, cuya finalidad es evaluar los niveles de riesgo para la salud humana y el medio ambiente que pueden representar las sustancias activas contenidas en los diferentes tipos de productos biocidas y, en consecuencia, autorizarlas o prohibirlas dentro del mercado europeo.
La revisión de los principios activos biocidas se inició en marzo de 2004 y debía finalizarse en mayo de 2014. No obstante, debido a su lentitud, se estableció un período de ampliación hasta el 31 de diciembre de 2024, fecha en la que CE prevé completarlo.
Sin embargo, con sólo cuatro años por delante, casi dos tercios del trabajo están todavía por hacer. Hasta el momento, se han concluido las evaluaciones de unas 250 combinaciones de sustancia activa y tipo de producto, de un total de más de 700 incluidas en el Programa de Revisión.
En este escenario, el pasado mes de febrero, la ECHA, las autoridades nacionales y la Comisión Europea acordaron un plan de acción para acelerar el proceso.
Causas del lento progreso
En una encuesta realizada por la ECHA a los Estados miembros, en 2018, se identificaron cinco causas principales para el lento avance del Programa de revisión:
- La competencia de prioridades para el trabajo de evaluación
- Recursos insuficientes en los Estados miembros
- La complejidad del proceso de evaluación
- La falta de prácticas viables
- Insuficiencia de datos en las solicitudes
Mayor apoyo a las autoridades nacionales evaluadoras
Para acelerar el Programa, la ECHA ha iniciado una serie de acciones para apoyar a los Estados miembros que actúan como autoridades competentes evaluadoras. Estas acciones estan relacionadas principalmente con el establecimiento de prioridades, la identificación de casos donde se necesita asistencia específica, asi como el análisis de los factores que podrían estar bloqueando el progreso en la evaluación de sustancias activas y sus posibles soluciones.
Así, se procederá más rápido en los expedientes que permanecen encallados en un solo problema, y la ECHA ofrecerá ayuda para resolver estos puntos conflictivos. Asimismo, se anima a las autoridades evaluadoras a abordar prioritariamente aquellas sustancias más relevantes,como son las que probablemente no serán aprobadas o las que deberían sustituirse.
La Agencia también está proporcionando ayuda directa a los Estados miembros para evaluar las sustancias activas. En este sentido, durante el 2019 apoyó con éxito la evaluación de 16 sustancias y dio consejos sobre la evaluación de las propiedades de disrupción endocrina para otras 11 sustancias.
La ECHA también tendrá un papel de coordinación más relevante en los procesos de sustancias activas similares que son evaluadas por diferentes Estados miembros, para garantizar que se evalúen simultáneamente y para que puedan tener lugar debates más eficientes en los grupos de trabajo.
Finalmente, se está poniendo énfasis también en ofrecer formación que cubra las necesidades específicas para el óptimo desarrollo de los expedientes y en la posibilidad de solicitar ayuda a corto plazo a los expertos de la ECHA.
Como resultado de estas acciones, la Agencia espera ver un aumento significativo durante 2020 de casos en que las autoridades competentes evaluadoras piden ayuda con sus evaluaciones, lo que a su vez tendrá un impacto positivo sobre la cantidad de opiniones que el Comité de Productos Biocidas pueda emitir durante el año.
Fuente: ECHA
