Scleroderma domestica es un insecto parásito que juega un papel crucial en el ecosistema de la madera vieja y carcomida. Este pequeño pero significativo depredador se especializa en parasitar larvas de coleópteros xilófagos, aquellos insectos que se alimentan de madera y que son conocidos por causar daños en muebles, vigas y estructuras de madera en general.

Scleroderma domestica  

Las especies del género Scleroderma no pueden vivir sin la presencia de coleópteros xilófagos, ya que dependen de sus larvas para alimentarse y reproducirse. Se les encuentra comúnmente en muebles, vigas y maderas afectadas por la carcoma, donde parasitan larvas de especies de los Anóbidos y los Cerambícidos. En zonas templadas, generalmente estos insectos producen una generación anual y tienen una mayor actividad durante la primavera.

Si bien podría considerarse como una forma de control biológico de la carcoma, su presencia en hogares u otros entornos habitados no es nada deseable, debido a sus dolorosas y molestas picaduras.

La hembra, de color oscuro, diminuta (hasta 4 mm de longitud), cuerpo alargado, sin alas y dotada de aguijón, es la que produce las picaduras. El macho, que es alado y carece de aguijón, se observa con menos frecuencia.

Las picaduras de Scleroderma domestica causan lesiones irritantes y pruriginosas, que suelen agruparse o alinearse en la piel según el recorrido que realice el insecto sobre el cuerpo.

Sclerodermus domesticus (hembra)/ Syrio via Wikimedia Commons

Indicador de la carcoma

Aunque las picaduras de Scleroderma son molestas para las personas, su presencia es un signo de un problema subyacente más grande: la infestación de carcoma. La presencia de este insecto en un inmueble es un buen indicador de la existencia de carcoma en la madera de algún elemento estructural o algún mueble.

Las hembras de Scleroderma domestica penetran por las galerias excavadas en la madera por la carcoma, buscando selectivamente las larvas de los xilófagos que están próximas a su estadio adulto.

Una vez que encuentran una larva adecuada, la paralizan inyectándole veneno con su aguijón. La larva servirá de alimento para la hembra y para sus descendientes. Tras ingerir la hemolinfa de la larva, la hembra de S.domestica deposita sus huevos en el interior de la larva. De ellos naceran larvas que se fijan a la larva parasitada y la van devorando, obteniendo los nutrientes necesarios durante el tiempo de su desarrollo. Al finalizar su crecimiento la abandonan para pupar y transformarse en adultos.

Combatir Scleroderma doméstica

Como hemos visto, la presencia de Scleroderma domestica en una vivienda es un claro indicador de una infestación de carcoma. Dado que el parásito depende de la carcoma para sobrevivir, el control de S. domestica debe centrarse en eliminar la carcoma.

Al abordar la raíz del problema y eliminar la carcoma, se controlará de forma natural la población de Scleroderma al eliminar su fuente de alimentación y reproducción.

Se recomienda realizar una inspección exhaustiva de todos los elementos de madera, en busca de indicios de carcoma. Y será necesario realizar tratamiento curativo de la madera afectada por la carcoma, o eliminar la madera afectada que no pueda ser tratada.

Imagen cabecera: Sclerodermus domesticus / Syrio via Wikimedia Commons