Normas de bioseguridad frente a la gripe aviar en explotaciones avícolas
Enviado por editora el Mié, 03/08/2006 - 09:41
El factor más importante de riesgo de entrada del virus de la gripe aviar en una explotación avícola es el hecho de que se llegue a producir el contacto entre las aves de corral y aves migratorias que sean portadoras del H5N1. Esto ocurre especialmente en explotaciones cercanas a humedales y rutas migratorias, y sobre todo si están al aire libre. Por otro lado, también puede producirse el brote si se introducen aves procedentes de las zonas de riesgo o por problemas de higiene en los vehículos y en las instalaciones.

El consumo global de biocidas en 2005 fue de 4.013 millones de dólares y la industria está creciendo a un nivel de un 4% anual. El principal consumidor mundial es Estados Unidos, aunque las principales empresas del sector en ese país están expandiendo sus actividades hacia China, Europa Oriental, India y América del Sur.
Su denominación completa es Directiva 98/8/CE del Parlamento Europeo y del Consejo de 16 de febrero de 1998 relativa a la comercialización de biocidas y pretende armonizar los textos legales existentes sobre la materia en los distintos países de la Unión. En España, concretamente, dió lugar a la aprobación del 
Una vez se ha tratada el agua con cloro, una operación ineludible si se quiere evitar todo riesgo de contaminación (por ejemplo, por legionella), es importante poder conocer el tipo de cloro residual existente para determinar la eficacia de la medida de desinfección. En ese sentido, es imprescindible poder discernir entre el CRL (cloro residual libre) y CRC (cloro residual combinado), ya que únicamente las aguas que presentan CRL garantizan que se ha producido una desinfección satisfactoria.

