¿Cómo encuentran las termitas subterráneas su alimento?. Estos laboriosos insectos sociales se desplazan desde el nido haciendo túneles, por los que avanzan en busca madera y otros elementos con celulosa para alimentarse. Su búsqueda no es sólo aleatoria sino que siguen ciertas señales químicas y del entorno.
Termitas subterráneas en busca de alimento
Algunas especies de termitas subterráneas pueden causar graves daños en elementos estructurales de madera de los edificios. ¿Cómo consiguen encontrar, desde sus nidos bajo tierra, la madera y otros materiales que contienen celulosa de los que alimentarse?
Según los expertos de la consultoría Pinto & Associates de Maryland (EEUU), mientras que las hormigas van y vienen desde un punto de alimentación hasta el nido, las termitas tienen otra estrategia y se desplazan en grupos por zonas "escaneando" el terreno en busca de fuentes de alimentación, alrededor de las galerías subterráneas que construyen. El área de búsqueda de alimento puede variar de tamaño según la especie de termita, la edad y el tamaño de la colonia o la disponibilidad de comida, o incluso puede variar de tamaño y forma en el lapso de unas semanas.
Las termitas que van en busca de alimento crean un sistema de túneles exploratorios ramificados, que se expanden en forma de estrella desde un punto central. Este patrón de búsqueda sistemático y radial de los túneles les ayuda a evitar búsquedas repetidas en una misma área. También existen evidencias de que, con sus túneles, las termitas dividen de forma uniforme su área de búsqueda. Este comportamiento de tunelización les ayuda a encontrar fuentes de alimento.
Otra estrategia de las termitas subterráneas para ubicar el alimento es su hábito de desplazarse a lo largo del borde de los objetos, ya sea bajo tierra o construyendo tubos de lodo en el exterior, ya que estos insectos son sensibles a la desecación por la luz del sol o el aire. Pueden seguir los cimientos de un edificio, tuberias, conductos, pavimentos, etc, hasta acceder a la fuente de alimento una vez que encuentran una grieta o abertura hacia el interior del edificio.
Factores ambientales
La actividad de forrajeo está influenciada por factores climáticos, como la temperatura o la humedad, y es más intensa en zonas de mayor humedad del suelo. Estudios han mostrado que las termitas subterráneas también son sensibles a las sombras térmicas (temperatura/humedad) proyectadas por objetos, como troncos o edificios, en la superficie del suelo y que buscan más alimento en estas zonas, que tienden a ser más húmedas.
También las características del suelo (los porcentajes de arena, arcilla y limo) afectan a la capacidad de las termitas para construir túneles y forrajear.
Señales químicas
Las termitas responden también a los olores emitidos por las plantas y la madera en descomposición, aunque sólo pueden detectar estos olores a una distancia corta.
Utilizan también señales químicas para comunicar el hallazgo de una nueva fuente de alimento. Las termitas que forrajean segregan feromonas por el camino y, una vez que encuentran alimento, regresan a la colonia reforzando su rastro de feromonas. A partir de aquí, el comportamiento de forrajeo aleatorio cambia hacia un comportamiento más estructurado y dirigido. Otras termitas siguen el rastro del olor de las feromonas hasta el alimento, mientras depositan más feromonas, y la colonia se organiza para construir tubos de lodo más permanentes que los exploratorios, con los que establece un via directa desde las galerias subterráneas del nido hasta la nueva fuente de alimento.
Fuente: Sandra Kraft, Larry Pinto:Techletter via www.pctonline.com