El virus de la fiebre hemorrágica Crimea-Congo (VFHCC) circula de forma permanente en regiones del centro y suroeste de España, donde el ciervo rojo (Cervus elaphus) es su principal huésped y las garrapatas Hyalomma spp. su reservorio y vector más común. Asi lo muestra un estudio realizado en más de 12.000 garrapatas, que destaca la necesidad de estudios más amplios para conocer mejor el riesgo real para la salud pública en España.
Virus de la fiebre hemorrágica Crimea-Congo
La fiebre hemorrágica de Crimea-Congo es una enfermedad grave, transmitida a los humanos principalmente por la picadura de garrapatas Hyalomma spp. que actúan como reservorio y vector del virus. Las garrapatas inmaduras comúnmente se alimentan de mamíferos de tamaño mediano y aves, pero los adultos prefieren los ungulados domésticos y salvajes, como los ciervos, que se consideran principales huéspedes del virus en España. Una vez que las garrapatas se infectan con el virus, se mantiene en ellas una transmisión sexual, transovárica y transestadial del patógeno.
En España el VFHCC fue detectado ya en el 2010, en garrapatas Hyalomma lusitanicum recolectadas en ciervos de Cáceres y posteriores estudios detectaron el virus en la misma área durante varios años. En el 2016 se detectaron los dos primeros casos humanos en España y hasta el momento se han descrito ocho casos más, todos ellos con origen en zonas de Castilla y León y Extremadura. El seguimiento epidemiológico de estos casos humanos reveló la necesidad de estudiar más a fondo la distribución del VFHCC en España.
Para ello, investigadores del CIBER Enfermedades Infecciosas (CIBERINFEC), el Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria, el Instituto de Salud Carlos III, la Universidad Complutense de Madrid, el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar y el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Pesca han llevado a cabo un estudio multidisciplinar de vigilancia del VFHCC en España. En este trabajo se considera a las garrapatas como centinelas de la distribución del virus, para obtener una visión general actualizada de la distribución y de la variabilidad genética de las cepas de VFHCC encontradas hasta ahora en España, con un enfoque especial en la evaluación de riesgos futuros.
Distribución del VFHCC en España
Las garrapatas se recolectaron en dos fases. En la primera (octubre 2016-marzo 2017) se recolectaron en especies de ungulados de caza mayor silvestres, como ciervos, jabalíes, gamos o muflones, así como de ganado bovino y cabras en 11 comarcas de 4 regiones: Castilla y León (CyL), Madrid (MAD), Castilla-La mancha (CLM)y Extremadura (EX), donde previamente se habia descrito la presencia del virus en garrapatas. En la segunda fase (mayo-septiembre de 2017 y marzo-julio 2018) se recolectaron las garrapatas en la vegetación de 15 comarcas de 4 regiones donde no se había descrito previamente la circulación del virus: MAD, CLM, Murcia (MUR) , y Andalucía (AND)
Se recolectaron y agruparon un total de 12 584 garrapatas: 3 959 grupos (10.793 garrapatas) de animales y 597 grupos (1.791 garrapatas) de vegetación, sobre las que se aplicaron métodos moleculares para identificar la presencia del virus.
Las garrapatas H. lusitanicum fueron las más predominantes entre las recolectadas sobre los animales y también fueron la especie en la que principalmente se detectó el VFHCC.
Los autores identificaron cinco regiones en el centro y suroeste de España donde está presente el VFHCC, en las que la circulación del virus sería permanente. Son zonas que se caracterizan por un ecosistema de bosque mediterráneo rico en ungulados silvestres, que sin duda favorece la presencia de garrapatas H. lusitanicum. También se detectó una alta variabilidad de genotipos del VFHCC.
Hyalomma lusitanicum y el VFHCC
Los hallazgos realizados en el estudio apuntan a un papel predominante de las garrapatas H.lusitanicum en la circulación del VFHCC, incluso se considera probable que la circulación del virus, incluidos varios genotipos virales y posibles nuevos reordenamientos, esté restringida a esta especie de garrapatas. Este aspecto se considera muy importante porque H.lusitanicum se está expandiendo rápidamente, como consecuencia de la propagación de uno de sus huéspedes naturales, los jabalíes.
Aunque no se ha demostrado la capacidad vectorial de esta especie de garrapata, el descubrimiento de ARN viral en ejemplares mudados después de una ingesta de sangre demuestra que el virus puede persistir en estas garrapatas y representan una fuente potencial de infección por VFHCC. Por lo que los autores consideran urgente establecer la capacidad vectorial de H.lusitanicum, así como sus preferencias por morder a los humanos, lo que parece ser un campo de investigación prometedor.
Según datos del ECDC, la distribución de H.lusitanicum en Europa el pasado octubre de 2021 sería la siguiente:
El riesgo de transmisión a humanos aún no ha sido posible calcular debido a la escasez de datos. Según los autores, se necesita investigación para determinar las razones detrás de la alta variabilidad del VFHCC, la distribución real y el origen de las cepas circulantes.
En todo caso, se hace un llamamiento a tomar conciencia sobre la situación del VFHCC en España y a tomar medidas para su vigilancia y control, de forma coordinada entre representantes de la salud y sanidad pública, entomólogos, virólogos y especialistas en salud animal y humana
Fuente: Sánchez-Seco M, Sierra M, Estrada-Peña A, Valcárcel F, Molina R, de Arellano E, et al. Widespread Detection of Multiple Strains of Crimean-Congo Hemorrhagic Fever Virus in Ticks, Spain. Emerg Infect Dis. 2022;28(2):394-402. https://doi.org/10.3201/eid2802.211308
Via: www.diarioveterinario.com