Científicos norteamericanos (EEUU) proponen utilizar tecnologias laser para eliminar los mosquitos portadores de la malaria, una enfermedad que afecta a millones de personas en el mundo y provoca más de un millón de muertes anuales, principalmente de niños. Parte de esta iniciativa está respaldada por la Fundación Gates.

Punteria con los mosquitos

Investigadores de Intellectual Ventures, una empresa de innovaciones fundada por antiguos ejecutivos de Microsoft en Washington, han desarrollado lo que denominan la valla fotónica antimosquitos. Consta de una serie de puntos equipados con una cámara sencilla y una bombilla. Las cámaras están conectadas a un ordenador central y cuando éstas detectan movimiento, el ordenador analiza si existe semejanza con el comportamiento de un mosquito. Si es así, el ordenador envia un laser y lo destruye.

El invento está liderado por Jordin Kare, astrofísico y antiguo científico del programa de defensa antimisiles de la administración Reagan, que establecia el uso de potentes lasers para destruir los posibles misiles intercontinentales al final de la guerra fria. Los misiles no llegaron pero la idea, al parecer, es aprovechable.

Según Kare, es posible detectar distintas especies de mosquitos, ya que sus alas baten con diferentes frecuencias. Especificamente se buscaria controlar la presencia del Anopheles gambiae, la especie mejor dotada para diseminar el Plasmodium, el parásito que produce la malaria cuando es transmitido por la picadura del mosquito.

Protección con infrarrojos

Otra propuesta, ésta financiada por la Gates Foundation, la desarrolla Szabolcs Marka, astrofísico de la Universidad de Columbia en Nueva York y consiste en la creación de una cortina de luz invisible impenetrable para los mosquitos.

Marka utiliza un diodo laser, una lente y una fuente de alimentación para generar una barrera de infrarrojos que cubra la puerta o la ventana. Los mosquitos, que son muy sensibles al calor y a la luz, al entrar en contacto con el haz de infrarrojos son sobreexcitados y se alejan o mueren.

Para una mayor seguridad, Marka propone ubicar dos o tres barreras de infrarrojos en la casa, por ejemplo en la puerta, junto a la cama y en las zonas donde los mosquitos suelen esconderse.

Fuente: The Economist

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