La novena Adaptación al Progreso Técnico (ATP) del Reglamento 1272/2008 sobre clasificación, etiquetado y envasado de sustancias y mezclas (CLP), que será publicada proximamente, implicará la revisión de las clasificaciones armonizadas de nueve sustancias activas utilizadas en rodenticidas anticoagulantes, que pasarían a ser clasificadas como tóxicas para la reproducción.
Sustancias activas para anticoagulantes clasificadas como tóxicas para la reproducción
Propuestas para revisar las clasificaciones armonizadas de nueve sustancias activas ampliamente utilizadas en rodenticidas anticoagulantes han sido incluidas en la novena adaptación al progreso técnico (ATP) del Reglamento CLP.
Las propuestas son para agregar en la clasificación y etiquetado de estas sustancias la clase de peligro "Tóxico para la reproducción" de Categoría 1A o 1B, con un límite específico de concentración de 0,003%.
Las nueve sustancias afectadas por la re-clasificación son: brodifacoum (Cat 1A), bromadiolona (Cat 1B), clorofacinona (Cat 1B), cumatetralilo (Cat 1B), difenacum (Cat 1B), difetialona (Cat 1B), flocoumafen (Cat 1B), warfarina (Cat 1A) y warfarina de sodio.
Tras conseguir un dictamen favorable del Comité REACH por unanimidad el pasado mes de febrero, se espera que la publicación de la novena Adaptación al Progreso Técnico (ATP) del Reglamento CLP sea el próximo mes de junio.
Cuando esto suceda, se espera que toda una gama de productos deba ser retirada del mercado en un futuro próximo, con la consiguiente preocupación de la industria del control de plagas.
Aunque la nueva clasificación armonizada no será obligatoria hasta el año 2018, la industria espera dificultades de forma inmediata. En este sentido, Bertrand Montmoreau presidente de la Confederación Europea de Asociaciones de Control de Plagas (CEPA) comenta "no podemos ir exponiendo productos que están clasificados como tóxicos para la reproducción, los clientes no aceptaran su uso ni en oficinas, ni en entornos privados, ni en la industria alimentaria y de piensos".
Una vez que la publicación del Reglamento de la ATP haga oficial la reclasificación, Montmoreau espera un fuerte impacto en el mercado de los rodenticidas anticoagulantes utilizados por profesionales, tanto en entornos comerciales como en casas particulares.
Los fabricantes deberán empezar a reemplazar de inmediato las sustancias activas con alternativas, algunas de ellas ya autorizadas bajo el reglamento de Biocidas, sin embargo, Montmoreau ve dificultades en tener que reemplazar un lote de nueve principios activos en una sola vez, ya que un uso excesivo de unas pocas alternativas podría aumentar el riesgo de resistencia.
La implementación de la ATP se realizará con un período de transición de 18 meses después de que el Reglamento entre en vigor. Se espera que los fabricantes utilicen este tiempo para eliminar las reservas existentes y poner en práctica la nueva normativa en productos ya autorizados. Sin embargo, es posible que algunos productos deban ser retirados del uso público general inmediatamente.
Todos los productos comercializados después de la entrada en vigor de la ATP deberan cumplir con la nueva clasificación y etiquetado armonizados (CLH).
La reclasificación afectará también al proceso de renovación de autorización para rodenticidas anticoagulantes, actualmente en curso y que debe finalizarse en diciembre de 2017.
Todos los productos en el mercado deberán estar etiquetados de acuerdo a la nueva clasificación y etiquetado armonizados al final del período de transición de 18 meses, que, dependiendo de la fecha de publicación de la ATP, se espera que sea para enero de 2018.
CA-reunion marzo 2016: Implementation of the 9th ATP Regulation to anticoagulant rodenticides
Fuente: chemicalwatch.com/
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